Esto implica que ese año, al igual que en 2018, la tasa de homicidios fue de 29 por cada 100 mil habitantes, la más alta de la que hay registro.

Tras reportar un máximo de 36 mil 685 homicidios durante 2018, las cifras preliminares para 2019 apuntan a una reducción de 0.6 por ciento anual. Así, el año pasado es el segundo con más asesinatos en el país, pero marca la primera baja anual desde 2014.

Con cifras preliminares, el Inegi señaló que siete de cada 10 personas fueron asesinadas con arma de fuego. Los 25 mil 30 registros que el organismo sumó en este rubro representan 68.6 por ciento de las causas de muerte, por arriba de los 3 mil 928 casos de homicidios con objetos cortantes y 2 mil 522 que resultaron de ahorcamiento, estrangulamiento y sofocación.

Los datos del Inegi se basan en certificados y actas de defunción, así como en cuadernos estadísticos que reportan las oficialías del Registro Civil, las agencias del Ministerio Público y los Servicios Médicos Forenses; y si bien no pueden tipificar feminicidios, el organismo exhibe que los asesinatos a hombres y mujeres muestran diferencias.

En 2019 asesinaron a 32 mil 372 varones, lo que representa 88.7 por ciento del total de homicidios; en el caso de las mujeres fueron 3 mil 874 casos documentados. Los matices están en la forma de muerte. En ambos casos lidera la agresión con arma de fuego: 70.6 por ciento en el caso de ellos, y 54.7 para las mujeres.

Como segunda causa de muerte para los varones constan las agresiones con objetos cortantes, mientras en las mujeres destacan ahorcamiento, estrangulamiento y sofocación. Por esta última vía fueron asesinadas 15.2 por ciento el año pasado, mientras en los hombres llegó a 5.9 por ciento.

Incluso con armas cortantes, 10.5 de los homicidios registrados contra hombres fueron con estos objetos, frente a 13.3 por ciento en el caso de las mujeres, expuso el Inegi.

En total, 15 entidades gobernadas por fuerzas de todo signo político vieron un aumento en el número de homicidios respecto de 2018.

Guanajuato lidera con el mayor número de asesinatos. El año pasado se reportaron 3 mil 974, seguido por el estado de México, con 3 mil 273. Respecto de 2018, ambos estados registraron alzas de 13 y 2.1 por ciento, respectivamente.

Por densidad de población, en Colima asesinaron a 105 personas por cada 100 mil habitantes. Es el registro más alto, y enseguida se ubican Baja California, con una tasa de 79, y Guanajuato, con 64, reportó Inegi.

En cuanto al incremento de un año a otro, encabeza la lista Sonora, con alza de 46.6 por ciento en homicidios –impulsado sobre todo por el asesinato de mujeres–; le siguen Aguascalientes (46.3), Hidalgo (40), Morelos (28.3), Coahuila (25), Tlaxcala (24.3), Tabasco (21.4) y Michoacán (17.9).

En Baja California Sur los homicidios se redujeron 48 por ciento; Nayarit (45.8), Tamaulipas (38.7), Yucatán (23.7), Guerrero (18.9), Jalisco (14.8), Zacatecas (11.8), Ciudad de México (11.5) y Quintana Roo, 10.8 por ciento.