Washington. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) comenzó este sábado la asamblea para elegir a su presidente con el asesor de Donald Trump, Mauricio Claver-Carone como único candidato, en medio de una polémica regional por la ruptura de una tradición de que la entidad fuera liderada por un latinoamericano.
Los 48 gobernadores iniciaron a las 08:00 hora de Washington (07:00 del centro de México) una reunión virtual para elegir al sucesor del actual presidente de la institución, el colombiano Luis Alberto Moreno.
Moreno está en el cargo desde 2005. El próximo presidente del BID tendrá un mandato de cinco años con posibilidad de relección.
La elección debía celebrarse en marzo en la reunión anual de la institución en Barranquilla, Colombia, pero debió ser aplazada al igual que otros eventos por la pandemia de Covid-19.
Estados Unidos -principal accionista del BID con 30 por ciento- rompió una tradición no escrita que regía en los 60 años de vida de la institución con sede en Washington por la cual un latinoamericano lideraba el banco y un estadunidense ocupaba la vicepresidencia.
Argentina -que buscaba presentar a su actual representante en el banco, Gustavo Béliz, como candidato, pero que finalmente no lo postuló- anunció el jueves que se abstendrá en la votación.
La candidatura de un estadunidense provocó irritación en Argentina, Chile, Costa Rica y México, que argumentaron que la votación -ya aplazada- debía volver a posponerse ya que la pandemia no permitió el debate adecuado.
Este intento se produjo a menos de dos meses de unas elecciones presidenciales muy reñidas en Estados Unidos en las que es posible que Donald Trump pierda la Casa Blanca frente a su rival demócrata Joe Biden.
Claver-Carone, un abogado de ascendencia cubana conocido por su firme oposición a La Habana y a Venezuela, acusó a los países que presentaron resistencia de "querer robarse el balón".
Costa Rica, que en un principio quería presentar a la ex presidenta Laura Chinchilla, desistió a principios de septiembre.
Estos países suman cerca de 22 por ciento de los votos, ponderados según sus acciones.
Para ganar, un candidato debe tener el apoyo de al menos 15 de los 28 países americanos y el respaldo de un número de países miembros del BID que le den mayoría de 75 por ciento del poder de voto.