Ciudad de México. Al menos 15 elementos balísticos de tres distintos calibres, cables cortados –al parecer de las cámaras de seguridad– y huellas hemáticas encontró la Fiscalía General de Justicia (FGJ) en el bar El Barquito, donde la madrugada del 29 de agosto ocurrió un tiroteo, se observaron dos cuerpos en el exterior y desaparecieron Karla y Christopher, de 20 años de edad.
De acuerdo con una de las entrevistas recabadas por policías de investigación, algunos de los heridos, que habían acudido a la reapertura After Party. Traficantes del Merengue
, y que pagaron entre 80 y 100 pesos para ingresar, fueron retirados a bordo de una motoneta.
De acuerdo con la carpeta de investigación CI-FIAZ/AZ-4/UI-3SD/1696/08-2020, se asentó que dos de los lesionados fueron Brianda Chávez y Francisco Zavala, de 30 y 37 años, quienes fueron atendidos en el Hospital Rubén Leñero.
Mientras, los familiares de Christopher Aguilar Hernández y Karla Elena Ramírez Murrieta interpusieron una denuncia ante la Fiscalía Especializada para la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas, al no tener ninguna razón de ellos.
Ambos jóvenes, quienes no se conocían, acudieron el 28 de agosto al bar, ubicado en avenida Tezozómoc 220-C, colonia San Miguel Amantla, en Azcapotzalco, donde se realizó una fiesta clandestina, pues violó las restricciones impuestas por la emergencia sanitaria.
Durante la madrugada, de acuerdo con versiones de testigos, varios sujetos realizaron detonaciones de armas de fuego dentro del establecimiento, por lo que los asistentes corrieron en distintas direcciones.
La FGJ informó que cuenta con diversas líneas de investigación: a una de ellas, particularmente, ya se le da el seguimiento pertinente, pero a fin de no afectar la indagatoria, en este momento no es prudente revelar mayores datos
.
En estos días, sin embargo, se han desarrollado diversas diligencias con la colaboración de los familiares de ambos jóvenes, desde la inspección física del lugar, la recolección de los indicios y la toma de fotografías del área, así como diversas entrevistas tanto al propietario del negocio, testigos, amigos y personas allegadas a los jóvenes ausentes, una de las cuales proporcionó fotografías y un video que tomó antes del tiroteo, indicó.
Familiares de los jóvenes denunciaron que les hicieron llegar un video de manera anónima, en el que se observan dos cuerpos afuera del bar, que coinciden con las características de Karla y Christopher, en medio de personas que corren y motonetas con hasta tres chicos encima.
De acuerdo con mensajes y llamadas que recibieron, los cuerpos los subieron a una camioneta blanca, de la cual se pierde su rastro, y la cámara del C5 ubicada frente al bar no tiene imágenes de los hechos, por la forma en que está colocada
, señalaron.
Los policías que acudieron al lugar dijeron que el bar no tenía dueño y no sabían quién empezó la fiesta
, cuando la alcaldía debe contar con un registro, afirmaron, y pidieron a la población que si tiene conocimiento del paradero de los jóvenes, se los hagan saber.