Ciudad de México. La inversión y el consumo registraron las alzas más altas para un mes durante junio de 2020, esto luego de que ambos indicadores se hundieron con la instalación de la pandemia de Covid-19 en México y el cierre económico que la acompañó. Aún con ello, los dos están debajo de los niveles previos a la pandemia. Incluso muestran retrocesos de dos y una década, respectivamente.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que la inversión fija bruta –que involucra los recursos que van a la adquisición de maquinaria, construcción y equipo para promover la producción- incrementó 20.1 por ciento en junio, respecto a mayo del mismo 2020.
En su interior, la construcción aumentó 13.7 por ciento, y el gasto en maquinaria y equipo creció 25.8 por ciento. Si bien todo fueron alzas, dado que se comparan con meses en que la actividad económica estuvo semiparalizada, destacan la inversión en equipo de transporte ya sea nacional o importado.
El reporte con cifras desestacionalizadas, que procuran hacer más equiparable la medición al eliminar los efectos de calendario, exhibe que pese al aumento el indicador está 25.2 por ciento por debajo de junio de 2019. Lo mismo todos sus componentes. La construcción está 26.6 por ciento abajo y el gasto que maquinaria y equipo lo está en 25.3 por ciento.
El consumo privado en el mercado interior repuntó 5.5 por ciento en junio, respecto a mayo de 2020. Es también el crecimiento más alto del que hay registro, pero viene luego de dos meses en que la movilidad se redujo al mínimo para evitar los contagios. Entre sus componentes, aumentaron 4.5 por ciento la adquisición de bienes y servicios nacionales y 10.6 por ciento el de mercancías importadas.
Tal como otros indicadores, en la comparación anual lleva una baja de dos dígitos, de 19.6 por ciento. Producto de la baja de 19.2 en el consumo de bienes y servicios de orgina nacional y 25.4 por ciento en los importados, sobre los que pesa la depreciación del peso en el tipo de cambio.