Aunque se ha decidido no solicitar mayor contratación de nuevos créditos, el monto general de la deuda pública se ha incrementado como efecto directo de la depreciación del peso mexicano frente al dólar y la crisis económica, reconoció el presidente Andrés Manuel López Obrador. Mencionó que en la actualidad el monto general oscila entre 10 y 12 billones de pesos lo cual representa el 8 por ciento del Producto Interno Bruto, porcentaje que, por estas variaciones económicas, pudiera cerrar en diciembre en el 10 por ciento.
Al referirse a la situación económica del país, dijo que el paquete presupuestal para el próximo año incluirá partidas que garanticen los principales apoyos a la población como las pensiones a adultos mayores, las becas a niños discapacitados, entre otros. “El presupuesto próximo viene ajustado para atender fundamentalmente lo básico. ¿Qué es ? Que no le falte a la gente sus apoyos, que se cumpla lo que establece la constitución, en pensiones, becas, en atención médica, medicamentos gratuitos. “
Sin embargo, habrá recortes en el gasto corriente de manera considerable. De igual forma, acotó el presidente, se va a recoger todo el dinero que se manejan en fideicomisos para que lo opere la Secretaría de Hacienda, por lo que confió en que se aprueben las modificaciones legales para su desaparición.
Paralelamente, mencionó que en abril el Banco de México deberá entregar una compensación importante al gobierno federal como consecuencia de las modificaciones cambiarias. Será una cantidad importante que ya se está contabilizando para el presupuesto de 2020, aunque aún se están haciendo las cuentas del monto total.