Ciudad de México. Directores y profesores de bachilleratos tecnológicos y comunitarios señalaron que prevalece la “incertidumbre sobre cómo operaremos en el contexto de la emergencia sanitaria, no sólo por la organización de clases a distancia, sino por la elevada tasa de deserción que previsiblemente se va a presentar”.
En entrevista con La Jornada, indicaron que la Secretaría de Educación Pública (SEP) “pareciera enfocar todos sus esfuerzos a la educación básica, cuando la media superior necesita de apoyos urgentes, como atender las condiciones de mantenimientos de los planteles, porque aún sin operar, se deben cubrir servicios, pero sin acceso a cuotas voluntarias de los padres tampoco hay recursos para cubrir las necesidades más básicas”.
De acuerdo con datos de la dependencia federal, en el ciclo escolar 2020-2021, la matrícula de educación media superior escolarizada es de poco más de 5.2 millones de jóvenes, quienes asisten a más de 20 subsistemas diferentes, entre ellos los bachilleratos tecnológicos y de telebachillerato comunitario, además de los planteles adscritos a universidades autónomas.
En el caso de los telebachilleratos comunitarios, docentes destacaron que “enfrentamos no sólo carencias materiales y de conectividad. Nuestros alumnos pertenecen a niveles socioeconómicos bajos, donde el trabajo para la subsistencia familiar es una prioridad, por lo que competimos con esta necesidad para que puedan volver a las clases, que al ser a distancia, hacen mucho más difícil mantener el contacto con nuestros estudiantes”.
En regiones de difícil acceso, dijeron, como la sierra de Oaxaca, “la población escolar vive muy dispersa, por lo que no sólo carece de acceso a la señal de televisión o Internet, buscar algún mecanismo de entrega de materiales y cuadernos de trabajo implicará un enorme esfuerzo de parte tanto de los maestros como de los propios muchachos”.
Profesores de planteles tecnológicos en Ciudad de México destacaron que la indicación de la SEP es que “nos preparemos para un regreso a clases a distancia a partir del próximo 21 de septiembre, ya que estas dos primeras semanas serán remediales, principalmente para los grupos de jóvenes que no pudimos contactar por ningún medio en estos cinco meses”.
En promedio, indicaron, cerca de 10 por ciento de los alumnos de cada plantel no han sido contactados, “por lo que se abrió la posibilidad a los maestros de que pueden convocar a un máximo de cuatro alumnos por grupo, de los más rezagados, es posible coordinarse y garantizar todas las condiciones de seguridad en el plantel, pero el desafío es poder ubicarlos”.