Su conferencia de prensa habitual se centró en la corrupción, aludiendo a los dos casos graves asociados al ex director de Petróleos Mexicanos Emilio Lozoya y al ex secretario de Seguridad Pública Genaro García Luna, y sus posibles impactos con ex presidentes.

El mandatario expresó que no pretende ser verdugo, pero insistió en que la gente decida, mediante consulta popular, si se les enjuicia, enfatizando en que para concretarla, las 1.6 millones de firmas necesarias deben entregarse entre el primero y el 15 de septiembre. Me gustaría mucho que den su firma los ciudadanos que están por que se les juzgue.

Si bien hay opciones para que el Congreso o él mismo promuevan el juicio, es preferible que sean los ciudadanos, dijo. La gente debe decidir si “quiere que continúe la corrupción, que sigan robando el presupuesto, que siga gobernando el crimen organizado, o quiere que haya un verdadero estado de derecho, libertades, democracia. Hasta en el deporte, ¿le van a seguir pagando a un deportista tanto para que tenga uno, dos, tres, 10 Ferraris? ¿En un mundo tan desigual va a seguir siendo lo material lo que rija?

Al agregar sobre el video en el que aprece su hermano con David León, ex coordinador de Protección Civil, confió en que como lo hizo él de ponerse a disposición de la fiscalía, espero que mi hermano haga lo mismo y yo estoy también, repito, en disposición de asistir o de enviar el informe que me soliciten.

A una semana de su segundo Informe de gobierno, ratificó que la pandemia ya está pasando, la economía nacional está recuperándose y no caímos en la tentación de endeudarnos, como otros países.

Precisó que el primero de diciembre quedarán colocadas las bases principales de la transformación y al conservadurismo le será muy difícil retrogradar, porque añoran, dijo, los tiempos de los moches.

Anticipó que el primero de septiembre no habrá mañanera, porque dará su segundo Informe temprano en Palacio Nacional, horas antes de que lo presente al Congreso. Destacó que sus principales logros han sido el combate a la corrupción, la política del bienestar, así como el manejo de las crisis sanitaria y económica.

Cuando representantes de medios alternativos le preguntaron sobre el fin de la publicidad gubernamental, sostuvo: ha habido una reducción muy importante de lo que se destinaba a publicidad de manera abierta y encubierta, pero vamos a ver si se reduce más o se elimina, no lo descartemos, hay que analizarlo, que sea un tema de debate.

Señaló que es partidario de que el pueblo esté informado, esa es la función de los medios, además de recordar que generan empleos, pero se pronunció porque la prensa, por iniciativa propia, se autorregule.