Buenos Aires. Declaraciones del ex presidente Eduardo Duhalde (2002-203), quien afirmó que “es ridículo que piensen que el año que viene va a haber elecciones” legislativas en el país, al sugerir que podría producirse un golpe de Estado, provocaron una ola de rechazo de diversos sectores, incluyendo a los organismos de derechos humanos, que destacan la gravedad de estos dichos, en el marco de los grandes esfuerzos del gobierno de Alberto Fernández para enfrentar la pandemia del Covid 19, la de la deuda externa” contraída por el gobierno anterior y la dura situación social heredada, entre otros señalamientos.
Duhalde apareció en una entrevista televisiva, como parte de una campaña mediática, sustentada en las acciones de la derechista alianza de Juntos por el Cambio, y las negativas a discutir importantes y necesarias propuestas para realizar importantes reforma en el sistema judicial, un tema tan controvertido y manipulado, por el poder político opositor y económico del país.
“¿Por qué va a haber elecciones? Tenemos un récord, la gente no sabe o se olvida: entre 1930 y 1983 hubo 14 dictaduras militares, presidentes militares”, dijo Duhalde , y sostuvo que existe un regreso a lo que fue el fin del año 2001, cuando se produjo un estallido social, que llevó a la renuncia del entonces presidente Fernando de la Rúa, el 20 de diciembre de ese año, quien huyó en helicóptero de la casa de gobierno, mientras había multitudes en las calles.
Consideró Duhalde que los militares han regresado a la región y recordó que en Brasil hay un gobierno democrático cívico-militar, “sabemos lo que es Venezuela, lo que es Bolivia, sabemos que en Chile quedan como factor de poder los carabineros, como antes, y el ejército”, y remarcó sus predicciones de que “no va haber elecciones”
Y agregó: “No digo que Alberto Fernández vaya a sufrir un golpe”, pero advirtió que el país corre riesgos, reconociendo que ésta es la presidencia con mayor complejidad, por las circunstancias y que se podría ir hacia “un escenario evidentemente peor que el de 2001, ya que puede terminar en una especie de guerra civil”. De alguna manera predicciones similares surgen de los dirigentes de Juntos por el Cambio, que hostigan cada día al gobierno.
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, dijo que no existe ninguna posibilidad de golpe en Argentina, que el sistema democrático funciona bien y consideró que el escenario que expuso Duhalde es absolutamente improbable y que las fuerzas armadas están totalmente integradas al sistema democrático.
Abuelas de Plaza de Mayo, Madres Línea Fundadora e HIJOS de Desaparecidos y otros publicaron un documento donde destacan los 37 años de democracia “que, con avances y retrocesos, se ha ido afianzando. Una y otra vez, el pueblo argentino ha dicho nunca más y lo seguirá haciendo en cada oportunidad que los destituyentes de siempre intenten socavar el orden constitucional”. También destacaron que “el pueblo argentino ha decidido –y lo volverá a reafirmar cada vez que sea necesario– que (la de 1976) fue y seguirá siendo la última dictadura” llamando a estar alertas y alentando a la unidad. “No permitamos que los discursos que pretenden sembrar el miedo y el caos le ganen al amor y a la ternura. Ni hoy ni nunca más"
El presidente, Alberto Fernández, volvió a repetir hoy que “algunos” -le "recomendaban que la economía no se frene y que se caiga lo que se tenga que caer, que se enfermen los que se tengan que enfermar y que mueran los que se tengan que morir”, y que decidió preservar la vida de los argentinos antes que ganar un peso más en la economía. Esto lo dijo el lunes al destacar que eso le dijo su antecesor Mauricio Macri en el último diálogo que tuvieron
Destacó que mirando los resultados de la economía y viendo que el salario real de un trabajador cayó en la pandemia, pero cayó a la mitad de lo que cayó el año anterior, cuando sin pandemia gobernaban como gobernaban, digo no me equivoqué (…) Volvimos después de cuatro años de los que no quiero hablar y, por momentos, quisiera no acordarme. Volvimos para ser mejores y estamos siendo mejores con estas cosas”.
La oposición sigue en tanto preparando marchas, en esta capital, frente a la inercia del gobierno de Juntos por el Cambio en la ciudad, que a su vez reprime cualquier otra manifestación por derechos humanos , o contra los incendios de productores agrarios en el reservorio del Delta del Paraná como sucedió hoy a los que reprimió con violencia, la policía de la ciudad.