Ciudad de México. Dos bodegas de granos de bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional fueron incendiadas intencionalmente el pasado sábado en el crucero de Cuxuljá, sobre la carretera que va de Oxchuc a Ocosingo, en Chiapas.
Entre las 09: 00 y las 11:00 horas, transportistas de Oxchuc, pertenecientes a la Organización Regional de Cafeticultores de Ocosingo (ORCAO) habrían rociado con gasolina y prendido fuego a las construcciones de madera y techo de lámina que servían para almacenar maíz y café de las bases zapatistas de municipio autónomo Moisés Gandhi.
Antes de incendiar las modestas construcciones, según versiones periodísticas, los orcaístas habrían saqueado los granos allí almacenados. Los hechos se dan en medio de un conflicto de varios años entre el EZLN y la ORCAO por tierras recuperadas después de 1994, cuando la agrupación participó en el levantamiento zapatista y la ocupación de fincas ganaderas en la región de Ocosingo.
El problema se desató en 2001, cuando la ORCAO abandonó la resistencia zapatista y se acogió a los programas de regularización impulsados por el gobierno panista-perredista de Pablo Salazar Mendiguchía y los gobiernos estatales posteriores.
Múltiples hechos han ocurrido en veinte años. El 20 de enero de este año, la ORCAO pidió la presencia de la Guardia Nacional y el “desarme” de los zapatistas de Moisés Gandhi. En abril, tras una confrontación en tierras de cultivo del territorio autónomo, la organización cafetalera reiteró su petición al gobierno federal y estatal para que interviniera con la Guardia Nacional y los cuerpos policiacos para lograr “la regularización de sus tierras”, presuntamente “compradas” a través del programa gubernamental Fondo de Fideicomiso ORCAO95.
Testigos del lugar señalaron a miembros de la ORCAO como causantes del incendio, pero ésta niega extraoficialmente ser responsable de la agresión.
Aunque el EZLN no se ha pronunciado al respecto, la Coordinación Metropolitana Anticapitalista y Antipatriarcal con el Consejo Indígena de Gobierno del Congreso Nacional Indígena denunció las agresiones y el incendio intencional de las bodegas de las bases de apoyo zapatistas. “Responsabilizamos al gobierno estatal de Chiapas que encabeza Rutilio Escandón Cárdenas y al gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador por su complicidad y omisión en estos ataques paramilitares”, expresó la coordinación en redes sociales.
Existe un proceso de diálogo en el que participan ambas partes con la mediación de organismos no gubernamentales y la parroquia católica de Oxchuc, en el cual hasta ahora no se ha logrado ningún acuerdo definitivo.