Indianápolis, EU. El piloto japonés Takuma Sato logró este domingo su segundo triunfo en las 500 Millas de Indianápolis con una remontada en la recta final frente a Scott Dixon, mientras el español Fernando Alonso terminó en el lugar 21 sin opciones de completar su ansiada Triple Corona.
En sexta posición quedó el debutante mexicano Patricio 'Pato' O'Ward, de 21 años, quien llego a ocupar el tercer lugar en esta 104 edición de la prueba, con ese lugar supera a Adrián fernández que había alcanzado el séptimo en 2005.
Takuma, ganador en 2017, superó en las últimas 20 de 200 vueltas a Dixon, quien había encabezado desde el principio la carrera en el circuito Indianapolis Motor Speedway (4km), este año sin espectadores por culpa de la pandemia de coronavirus.
"Es increíble", celebró Sato, de 43 años, envolviéndose en la bandera japonesa. "Este es un gran deporte. Estoy orgulloso de ganar de nuevo. Nos sacrificamos mucho".
Un fuerte accidente del estadounidense Spencer Pigot provocó que se levantara la bandera amarilla a cinco vueltas para el final, lo que impidió que el neozelandés Dixon y Sato protagonizarán un duelo hasta la línea de meta, que el japonés acabó cruzando tras el auto de seguridad.
"Es una derrota muy difícil de tragar, seguro", reconoció Dixon. "Hubieran sido cinco vueltas muy interesantes".
"Realmente no sé cómo lo íbamos a hacer (para ganar). Iba a ser muy difícil", admitió el neozelandés, ganador en Indianápolis en 2008.
En tercera posición concluyó el estadounidense Graham Rahal.
- Alonso, contento por terminar -
En su segunda participación tras la de 2017, cuando abandonó por problemas mecánicos, Fernando Alonso logró terminar la carrera superando de nuevo numerosos problemas en su Arrow McLaren, que lo dejó incluso sin embrague.
"¡500 millas completadas! ¡Una gran experiencia! ¡Habíamos hecho ya la mitad de la remontada y ahí nos quedamos sin embrague!", dijo Alonso tras la prueba "¡Cada 'pit stop' era una arrancada manual con mecánicos empujando a la vieja escuela! Contento de todas formas".
El doble campeón de Fórmula 1 partía con una gran desventaja al salir desde la lejana posición 26 de la parrilla, y entre el gran tráfico no pudo lograr su objetivo de remontar posiciones en las primeras vueltas.
Durante la carrera, el español llegó a avanzar hasta el 15º lugar pero en la recta final sufrió problemas en el embrague que le impedían cambiar de marcha y hacer una última parada para sustituir neumáticos.
A sus 39 años, el español sigue sin alcanzar la única prueba que le falta para completar la Triple Corona del automovilismo, que requiere también de triunfos en el Gran Premio de Mónaco de F1 y de las 24 de Le Mans, una gesta que solo ha podido ser completada por el británico Graham Hill, en 1972.
Otro español, el debutante Alex Palou, que partió en la séptima posición de la parrilla, tuvo que abandonar tras estrellarse contra un muro en la vuelta 122 cuando intentaba alcanzar la octava posición.
"Me sentía muy bien con el auto. Es una pena para el equipo, patrocinadores, todo el mundo que nos apoya. Lo siento mucho", dijo el piloto, de 23 años. "Estábamos en una buena posición y podríamos haberlo hecho muy bien al final".
Sato celebró el triunfo frente a las imponentes y silenciosas gradas del Indianápolis Motor Speedway, sin la inigualable atmósfera que crean los hasta 400 mil espectadores que puede llegar a albergar el recinto.
La pandemia de coronavirus provocó también que la prueba se aplazara este año desde su tradicional fecha de mayo hasta agosto.