Además de presentar exámenes ante sinodales, cada cadete debe demostrar que ha adquirido los conocimientos militares necesarios en cuanto al manejo de armas, mando y operaciones para enfrentar agresores que actúan como francotiradores, que realizan aciones armadas en contra de los integrantes de las fuerzas armadas en patrullajes o en puestos de vigilancia.
Entre los trabajos de investigación de los cadetes se encuentran los efectos ocasionados a la población civil en lugares de influencia de la delincuencia organizada (Ciudad Mier, Tamaulipas en 2010) y la actuación del Ejército
; los riesgos a la seguridad de las familias del personal militar con motivo de su participación en operaciones de apoyo a la seguridad contra la delincuencia organizada
, así como el empleo adecuado del uso de la fuerza para repeler correctamente las agresiones y evitar la vulnerabilidad contra los grupos delictivos
.