La petición a Interpol se realiza luego de más de 10 días de búsqueda por parte de elementos de la Policía Federal Ministerial y que se solicitara a las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) la emisión de una alerta migratoria por si alguno de ellos es detectado intentando salir del país.
Los dos empresarios y sie-te personas más están acusadas de participar en una red delictiva que desvío más de mil 200 millones de pesos de la sociedad cooperativa a través del supuesto pago de bienes y servicios a empresas fachada.
Por otra parte, integrantes de dos facciones de la Cooperativa Cruz Azul, una conformada por simpatizantes del director general Billy Álvarez, prófugo de la justicia, y otra, constituida por disidentes u opositores al directivo, se enfrentaron la noche del miércoles en las afueras de la planta de la fábri-ca de cemento ubicada en la localidad de Jasso, Hidalgo.
En la confrontación, cuyo saldo fue blanco, hubo explosiones de cohetones y disparos al aire. No se sabe con certeza cuál de los dos grupos realizó las detonaciones. También se arrojaron gases lacrimógenos.
El sector conocido como disidentes, encabezado por Víctor Velázquez y José Antonio Marín, quienes presiden los consejos de Administración y Vigilancia de la Cooperativa, así como por Wilfrido Arroyo, ex gerente de la planta, intenta-ron de forma infructuosa apoderarse de las instalaciones, lo que fue impedido por cooperativistas afines a Álvarez, tras lo cual se retiraron.
Después de un par de horas que duró el enfrentamiento, 40 elementos de la Policía Municipal de Tula y Seguridad Pública Estatal arribaron a las instalaciones de la cementera para evitar otro choque.
“En estos momentos en las instalaciones de la planta de Cruz Azul en Hidalgo un grupo de choque ajeno a la empresa y presumiblemente de sindicatos externos está buscando tomar la planta por asalto con lujo de violencia sin que las autoridades intervengan.
La comunidad de la Cooperativa llama a los medios y socios para ser testigos de una ilegalidad más al amparo de la impunidad en la que se mueven Marín y Velázquez
, informó en la noche del miércoles la oficina de comunicación de la cementera.
Guardias en Lagunas
En tanto, socios y trabajadores de la cooperativa en Lagunas Oaxaca realizan guardias ante la amena-za de que las instalaciones sean tomadas por los disidentes. No vamos a caer en confrontación, la Cruz Azul merece paz, no vamos a permitir que se acerquen aquí, es nuestro territorio y lo defenderemos
.
Los socios de la empresa ex-pusieron que viven momentos de tensión, por lo que se organizan para defender a la cementera. El cooperativista Manuel Sutro apuntó que son 10 mil 500 familias que dependen de la Cruz Azul, entre ellos jubilados que están enfermos, todos preocupados por la situación
.
Interpondrán demanda
Mauricio Soto, abogado de los cooperativistas que respaldan a Guillermo Álvarez, señaló que interpondrán una demanda contra quien resulte responsable
, luego de que un grupo de agentes privados
intentaron tomar con armas y sin una orden oficial
la planta de la cementera en Hidalgo.
Indicó que los disidentes quieren amedrentar a los cooperativistas, porque se ha convocado a una asamblea general, que es el máximo órgano, para el 26 de agosto con la intención de nombrar nuevos consejeros de Administración y Vigilancia y así serían nulificados
.
Agregó que la planta de Hidalgo funciona con normalidad y los cooperativistas harán guardias para defenderse
. Hasta el cierre de esta edición, el grupo encabezado por Marín y Velázquez no emitió una postura respecto de los incidentes.
“La mayoría de los socios no están de acuerdo con los actos que hicieron Marín y Velázquez al tomar las oficinas, pues han llegado al grado de no dejar entrar a los otros cooperativistas, el juez les concedió entrada para administrar, mas no para que se atrincheren en esas instalaciones.
La cementera Cruz Azul es una Cooperativa de 715 socios y cada uno tiene el mismo valor, la gente que tomó las oficinas en Periférico Sur representan a lo mucho 70 socios, es decir, son el 10 por ciento. Guillermo Álvarez es uno más, tampoco es el dueño de la cementera, y él tiene un proceso legal que atender
, abundó Soto.