Ciudad de México. El Congreso de la Ciudad de México recibió la primera iniciativa para prohibir la venta de comida chatarra a menores de edad, a fin de prevenir enfermedades como diabetes y obesidad.
Luego de que en Oaxaca y Tabasco se prohibió la venta de esa comida, la Comisión Permanente del Congreso local recibió ayer la propuesta de reforma a la Ley de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Ciudad de México.
La iniciativa adiciona un artículo bis en el que quedaría prohibida la venta, entrega, donación, distribución y regalo de alimentos envasados de alto contenido calórico y energético, así como bebidas azucaradas a niños y adolescentes.
Estas acciones también quedarían prohibidas en instituciones educativas, públicas y privadas, de nivel básico y medio superior. Incluso se prohíbe la colocación de máquinas expendedoras de productos chatarra.
En la restricción quedarían exentas madres, padres o tutores legales de los menores de edad.
Si bien no se propuso específicamente una sanción, la iniciativa establece que la infracción sería considerada como delito contra la salud.
Asimismo, ordena a la Secretaría de Salud local establecer los productos de alto valor calórico y azúcar conforme a la norma oficial mexicana.
Con esta reforma se garantizaría lo dispuesto en el artículo 47 de la citada ley para reducir la morbilidad y mortalidad, y combatir el sobrepeso, la obesidad y trastornos de conducta alimentaria en menores de edad, así como promover una alimentación equilibrada, consumo de agua potable y fomento del ejercicio físico.
La iniciativa, propuesta por el diputado de Morena Miguel Ángel Macedo Escartín, y que fue turnada a las comisiones unidas de Atención al Desarrollo de la Niñez y de la Salud, se basa en cifras oficiales que indican que en 2018, entre 83 y 85 por ciento de la población de entre uno a 19 años de edad consume productos no recomendables
para consumo cotidiano, es decir, bebidas endulzadas, botanas, dulces, postres y cereales dulces.
Dado el incremento del consumo de alimentos no recomendados en la población mexicana y que han arrojado resultados congruentes que revelan la alta prevalencia de sobrepeso y obesidad que enfrentamos como mexicanos, es indispensable generar acciones que coadyuven a resolver este problema, generando acciones que aporten a la mejora de la dieta cotidiana y regulando el acceso de este tipo de productos en personas menores de edad
, se lee en la reforma propuesta.
En días pasados, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, informó que analizaría la posibilidad de prohibir la venta de comida chatarra a menores de edad en coordinación con diputados locales, dada la mala salud de la población mexicana que la hace más vulnerable a la actual pandemia de Covid-19.