Santiago. El gobierno chileno hizo una propuesta final al guía espiritual mapuche Celestino Córdova, quien cumple una condena de 18 años por asesinatos, cediendo parcialmente al pedido de volver a su hogar, para que deponga una huelga de hambre de 105 días.
"Esta es la propuesta final (...) Lo que necesitamos es que el 'machi' se pronuncie", dijo este domingo el ministro de Justicia chileno, Hernán Larraín, en un conferencia de prensa. Se trata de un permiso especial para que el líder mapuche visite su casa, o "rewe" -objetivo de su protesta-, pero por un plazo de 14 o 15 horas en lugar de meses.
Córdova había anunciado el viernes pasado que endurecería la huelga de hambre que mantiene para presionar por un permiso para visitar su hogar y así "renovar su espiritualidad", dejando de consumir líquidos, como lo hace hasta ahora.
Primero, dio un plazo de horas al gobierno, y luego lo pospuso hasta el lunes.
Guía espiritual del pueblo mapuche y curandero, Córdova se encuentra internado en el Hospital Intercultural de la ciudad de Temuco, debilitado por la protesta.
El jueves pasado, la Corte Suprema rechazó un recurso de amparo y negó la solicitud a Córdova, condenado por el asesinato de una pareja de ancianos en 2013.
"Él quería una permanencia de meses, pero le hicimos ver que los tribunales de Justicia la habían denegado y no había ninguna autoridad ni del gobierno ni de los tribunales que puedan autorizar lo que él solicita", explicó el ministro Larraín este domingo.
El caso de Córdova motivó un rebrote de la violencia en el sur del país, en particular en la región de la Araucanía (600 km al sur de Santiago), donde se asientan la mayoría de las comunidades indígenas mapuche, la mayor etnia chilena.