Ciudad de México. Por petición de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine), la Sociedad Mexicana de Salud Pública (SMSP) revisó y avaló los protocolos de operación sanitaria con que los cines han vuelto a operar durante la pandemia.
La SMSP, una asociación civil con amplia experiencia en el campo de la salud, analizó la evidencia científica que respalda las medidas sanitarias tomadas por las salas de cine y concluyó que el riesgo de contagio es bajo si se cumplen correctamente los protocolos.
Medidas como la distancia entre filas y asientos, así como su posición inclinada, además del uso de cubrebocas y la limpieza regular de manos, parecen ser efectivas para evitar contagios. Asimismo, y al tratarse de espacios donde el público permanece en silencio, la dispersión de partículas de saliva es baja, especialmente comparada con otras actividades de carácter público como son comer en un restaurante o asistir a un templo religioso.
Otras medidas que los complejos cinematográficos han adoptado para prevenir la propagación del virus son la constante ventilación de las salas, la señalización para mantener el distanciamiento físico entre personas y la higienización de las instalaciones entre función y función.