Washington. Brasil, la segunda nación más afectada a escala mundial por el Covid-19, después de Estados Unidos, rebasó 100 mil fallecimientos casi cinco meses después de su primer deceso confirmado, al acumular ayer 100 mil 477 muertes y 3 millones 12 mil 412 casos.
El ex ministro de Sanidad Luiz Henrique Mandetta acusó al presidente Jair Bolsonaro de exhibir una completa falta de empatía con las familias de los muertos. Mandetta fue cesado por Bolsonaro en abril pasado al defender el confinamiento social para contener la pandemia.
En Estados Unidos, David Diemert, supervisor de ensayos clínicos de la vacuna de la biotecnológica estadunidense Moderna, advirtió que será imposible probar la eficiencia del prototipo inmunológico si no se aplica a suficientes voluntarios ancianos y miembros de minorías étnicas en el país.
Es crucial incluir esos grupos en el proceso de pruebas, que podría extenderse por dos años, dado que el Covid-19 tiene el doble de letalidad entre negros y latinos, en relación con los blancos, según datos oficiales. Ocho de cada 10 muertes son de mayores de 65 años.
Diemert, médico especialista en enfermedades infecciosas y profesor en la Universidad George Washington, se apresta a reclutar a 500 personas en dos meses para realizar pruebas. Washington, que tiene 45 por ciento de población negra, es uno de los 90 lugares en el país donde se probará la vacuna ARNm desarrollada por los Institutos Nacionales de Salud y Moderna.
Las investigaciones involucrarán a 30 mil personas y tardarán al menos dos años para completarse, aunque sus desarrolladores han dicho que esperan tener resultados preliminares con los que podrían obtener una autorización para uso de emergencia dentro de unos meses en la nación más afectada por la pandemia en el mundo.
Yo diría que nuestro principal desafío será inscribir (para la prueba) a tantas personas en un periodo muy corto, mucho más rápido de lo que uno está acostumbrado
, comentó Diemert, quien supervisó los ensayos de vacunas contra el VIH y la anquilostomiasis, entre otras afecciones.
Hasta ayer, el Covid-19 dejó en Estados Unidos 162 mil 224 muertos, 4 millones 986 mil 345 contagiados y un millón 623 mil 870 recuperados, según la Universidad Johns Hopkins. California rebasó el umbral de los 10 mil fallecidos y se convirtió en el tercer estado más afectado del país, por detrás de Nueva York y Nueva Jersey, donde se registraron los primeros casos.
El presidente Donald Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas para ofrecer alivio económico adicional a los estadunidenses golpeados por la pandemia después de que sus negociadores fracasaron en alcanzar un acuerdo con el Congreso.
El magnate dijo que las medidas otorgarán unos 400 dólares adicionales por semana a decenas de millones de personas que quedaron desempleadas durante la crisis sanitaria, menos de los 600 dólares por semana aprobados previamente. Algunas de las medidas podrían ser cuestionadas ante la justicia, ya que la Constitución concede al Congreso la autoridad sobre el gasto federal.
Los republicanos sostienen que mantener los pagos en el nivel anterior, más alto, hubiera sido un desincentivo para que los desocupados busquen regresar al trabajo, aunque varios economistas, entre ellos algunos responsables de la Reserva Federal, rechazan eso.
Por otro lado, el Fondo Estratégico de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) destinó 75 millones de dólares para comprar exámenes de Covid-19, equipos de protección personal y otros suministros de salud para los países de América Latina y el Caribe.
El organismo destacó que la cooperación técnica y la adquisición conjunta hacen parte de la respuesta de la OPS a la pandemia, que ya se ha extendido a 54 países y territorios de las Américas, donde América Latina acumula 215 mil 859 fallecidos y 5 millones 412 mil 752 contagios, según un recuento de la agencia de noticias Afp.
Ecuador es el tercer país del continente con mayor tasa de fatalidad oficial, con 6.5 por ciento; le anteceden Canadá, con 7, y México, con 10.9, informó Gina Watson, representante de la Organización Mundial de la Salud en la nación sudamericana.
Chile superó los 10 mil decesos por el coronavirus, cinco meses después del primer caso registrado en el país, y a una semana de que el gobierno inicie un plan de desconfinamiento en su capital.
La Corte Suprema de Justicia de El Salvador declaró inconstitucional un decreto del Ejecutivo que fijaba las bases de cara a la reapertura económica en medio de la pandemia, al considerar que dicha decisión debe ser tomada por el Congreso.