José Antonio Y., El Marro, fundador y capo del cártel Santa Rosa de Lima, principal responsable del robo de combustible en el Bajío, fue capturado en un operativo encabezado por fuerzas del gobierno federal.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que este sujeto fue ubicado gracias a labores de inteligencia en el municipio Santa Cruz de Juventino Rosas, Guanajuato, por lo que se solicitaron órdenes judiciales para catear dos inmuebles.
La detención estuvo a cargo del grupo de élite del Ejército, que lo perseguía desde principios de este año, en un operativo limpio en el que no se registraron heridos ni fue necesario hacer disparos y con uso de tecnología de punta.
En el primer domicilio encontraron a El Marro y a cinco de sus guardaespaldas junto con una empresaria de Apaseo el Alto que había sido secuestrada días antes. Los hombres tenían en su posesión cinco armas largas, tres cortas y un lanzagranadas, además de una maleta con dinero en efectivo cuya cantidad aún no se determina.
En el segundo fueron capturadas tres personas más –una de ellas tenía pendiente una orden de aprehensión– y se encontraron 36 mil 400 pesos en efectivo.
La noticia, por Twitter
Los hechos fueron dados a conocer la mañana de ayer por el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, quien adelantó la difusión del operativo federal por medio de su cuenta de Twitter: Esta madrugada en un operativo conjunto entre fuerzas estatales y federales fue detenido el principal líder de un grupo criminal que operaba en la región Laja-Bajío
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El mandatario reconoció el respaldo del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño; del titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval González, y de la Marina, José Rafael Ojeda Durán; así como el jefe de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio. También agradeció el trabajo de la Fiscalía General del Estado y de la Secretaría de Seguridad Pública guanajuantense.
Más tarde, por medio de un tuit, Durazo Montaño informó que El Marro ya estaba a disposición de las autoridades judiciales de la entidad, pero que una vez que fueran cubiertas las formalidades jurídicas será trasladado al Cefereso (Centro Federal de Readaptación Social) del Altiplano para ponerlo a disposición del juez federal, que dictó orden de aprehensión por delincuencia organizada y robo de combustibles
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El funcionario agradeció el apoyo que la Fiscalía General de la República (FGR), el gobierno y la fiscalía estatales dieron para concretar la captura.
Seis años, suficientes para controlar la zona
A este grupo delictivo le bastaron seis años para convertirse en el principal responsable del robo de combustible en Guanajuato, además de controlar la ordeña de ductos (que es conocida como huachicol) e incluso dirigían la venta al menudeo del hidrocarburo sustraído.
Según cifras de Petróleos Mexicanos (Pemex), el número de tomas clandestinas descubiertas en ese estado pasó de 411 a mil 919 entre 2014 y 2018.
El fundador del cártel comenzó su carrera delictiva con atracos, uno de los cuales lo llevó a la cárcel en 2007; después se dedicó al tráfico de cocaína y luego, en 2014, se concentró en el robo de combustibles al perforar tomas clandestinas, para lo cual fundó la organización que tomó el nombre de una comunidad del municipio de Villagrán.
Eso trajo una rivalidad con el cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) que colocó a Guanajuato en uno de los primeros lugares del índice nacional de homicidios violentos.
En 2017 El Marro difundió en redes sociales un video en el que declaró la guerra a sus contrincantes por la hegemonía del triángulo de las Bermudas
, como se conoce a la zona de mayor huachicoleo en Guanajuato.
Cuando el gobierno federal inició la lucha contra el robo, su grupo delictivo comenzó a extorsionar y secuestrar a comerciantes y empresarios, principalmente del municipio de Celaya, donde de forma constante quemó camiones y vehículos.
El cártel Jalisco ofreció 500 mil pesos por él
En febrero de este año, el CJNG ofreció medio millón de pesos por entregarlo, lo cual se difundió por medio de lonas en diversos municipios de la entidad.
De enero a julio de 2020, un total de mil 386 personas fueron asesinadas con armas de fuego solamente en Guanajuato, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Según datos proporcionados por la Fiscalía General del Estado, 90 por ciento de los homicidios que se han registrado en la entidad están relacionados con esta guerra entre ambos cárteles.
El año pasado se perpetraron 2 mil 261 homicidios con armas de fuego; en 2018, 2 mil 135; en 2017 fueron 953, en 2016 sumaron 677 y en 2015 hubo 600 asesinatos, según reportó dicho sistema.
En entrevista con La Jornada a principios de julio, el titular de la FGR, Alejandro Gertz Manero, habló sobre la disputa entre esas organizaciones delictivas: Ha habido un crecimiento de la cantidad de personas que están no solamente en el narcotráfico, sino que prácticamente están teniendo ya el control de la vida cotidiana en ciertas regiones del país
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