Tel Aviv. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, señaló el domingo a las crecientes protestas contra su mandato, atribuyéndolas a unos "medios parciales que distorsionan los hechos y animan a los manifestantes".
Netanyahu afronta una oleada de protestas en las últimas semanas en las que los manifestantes piden la renuncia del veterano líder, acusado de corrupción, y condenan su gestión de la crisis del coronavirus. Netanyahu ha descrito las protestas como un intento de “anarquistas” e “izquierdistas” de derrotar “a un líder fuerte de derechas”.
Las protestas, pacíficas en su mayoría, aunque en ocasiones terminan con choques entre manifestantes y la policía. En otras, pequeños grupos de partidarios de Netanyahu y personas afiliadas a grupos de ultraderecha han agredido a los manifestantes.
En una perorata de seis minutos en una reunión del gobierno Netanyahu acusó a la prensa de “avivar” las protestas y de mostrar de forma parcial los episodios de violencia contra los manifestantes.
“Nunca había habido semejante movilización distorsionada, quería decir soviética pero ya ha adoptado rasgos norcoreanos, de los medios en favor de las protestas”, dijo.
Netanyahu afirmó que los medios ignoraron “la salvaje y descontrolada provocación, incluso llamadas diarias, incluso antes de ayer, a asesinar al primer ministro y a su familia".
El mandatario añadió que las marchas son caldo de cultivo para el virus y que se están permitiendo sin límites, bloqueando calles y barrios. Las protestas conservadoras no han tenido tanta libertad, afirmó.