La Alianza por la Salud Alimentaria informó que de acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), los etiquetados en alimentos y bebidas que advierten sobre los altos niveles de calorías, azúcares, grasas trans o sodio, podrían reducir el consumo de calorías por persona en México en 37 calorías/día, lo que incluye 23 calorías/día por consumo reducido de bebidas y 14 calorías/día por refrigerios, mientras que 1.3 millones de casos de obesidad podrían evitarse en los cinco años posteriores a la implementación del etiquetado frontal, lo que representa una reducción del 14.7 por ciento en la prevalencia de obesidad.
Destacó que a fines de 2019 se aprobó en México el uso obligatorio de una etiqueta de advertencia de "exceso de" en alimentos y bebidas que excedan los umbrales de azúcares, grasas o sodio añadidos recomendados por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el cual entrará en vigor a partir del próximo primero de octubre.
Por ello, investigadores del INSP hicieron un modelo del impacto del etiquetado frontal de advertencia sobre las tasas de obesidad y los costos relacionados en un periodo de 5 años,cuyos resultados se publicaron la revista PLOS Medicine este mes.
Detectaron que las etiquetas obligatorias de advertencia en alimentos y bebidas “podrían prevenir 1.3 millones de nuevos casos de obesidad y ahorrar mil 800 millones de dólares en costos de atención médica durante cinco años”.
La Alianza destacó que se utilizaron datos de una encuesta representativa a nivel nacional sobre el consumo de alimentos y bebidas de más de 6 mil adultos mexicanos. Entre sus hallazgos clave se incluye una estimación mil 100 millones de dólares ahorrados en costos de atención médica y 742 millones de dólares en costos indirectos, como la incapacidad para trabajar, los gastos del cuidador y la muerte prematura.