Ciudad de México. Durante la contingencia sanitaria por Covid-19, el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) ha apoyado a 73 mil 732 niños, niñas y adolescentes a través de las Casas y Comedores de la Niñez Indígena y Comunitarias.
En apoyo a la economía de las familias indígenas, el INPI también proporciona paquetes alimentarios e insumos básicos para mitigar la propagación del Covid-19 y procurar la alimentación saludable de beneficiarios del programa, señaló José Alberto Gallegos Ramírez, coordinador general del Administración y Finanzas del INPI.
Actualmente se cuenta con mil 57 Casas y Comedores de la Niñez Indígena administradas y operadas por el INPI, además de 254 Casas y Comedores Comunitarios del Estudiante Indígena, administradas y operadas por instancias comunitarias, que suman un total de mil 311 espacios de atención con presencia en 22 entidades federativas.
Este programa contempla cinco modalidades de apoyo a estudiantes indígenas de distintos niveles: hospedaje (Casas de la Niñez Indígena); alimentación balanceada y culturalmente adecuada; becas para nivel superior y apoyo a titulación; seguro contra accidentes, y; actividades complementarias social, lingüística y culturalmente pertinentes.
Además, el INPI implementa el Programa de Apoyo a la Educación Indígena para contribuir a la permanencia, desarrollo y conclusión del grado y nivel académico de las niñas, niños, adolescentes y jóvenes estudiantes, de cinco a 29 años de edad, pertenecientes a los pueblos y comunidades indígenas, inscritos en escuelas públicas en niveles educativos básico, medio superior y superior.
Durante la conferencia de prensa Avances y Resultados de los Programas Bienestar, sobre políticas de bienestar para personas y pueblos indígenas, en Palacio Nacional, Gallegos Ramírez presentó las acciones llevadas a cabo por el Instituto para avanzar en el ejercicio de los derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes indígenas y garantizar su acceso a la educación.
Este año el Programa de Apoyo a la Educación Indígena cuenta con presupuesto de poco más de un millón 590 mil pesos. Los recursos asignados a casas y comedores son administrados directamente por las comunidades, a través de Comités de Apoyo y Comités de Contraloría, instancias de participación social electas en Asamblea Comunitaria o en Asamblea de Padres de Familia; los primeros son responsables de administrar los recursos en coordinación con el INPI, y los segundos de observar el cumplimiento de sus propósitos.
El programa contempla la impartición de actividades complementarias y formativas, para ello se designan cuatro figuras de promotores de actividades formativas, que atienden Casas y Comedores de la Niñez Indígena: promotor de lenguas indígenas (541 en 22 entidades, para fortalecer la enseñanza y revitalizar las lenguas indígenas); promotor de artes y oficios; promotor agropecuario, y; promotor de computación.