Ciudad de México. El cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México, junto a sus obispos auxiliares y vicarios episcopales enviaron un mensaje a la feligresía, el día previo al comienzo de la apertura gradual del culto con feligreses en los templos, tras cuatro meses de suspensión por el Covid-19. A través de un videomensaje, conminaron a los feligreses a respetar los protocolos preventivos establecidos para evitar contagios.

Aguiar Retes, expuso que “vamos ya a iniciar el regreso (mañana 26 de julio) al culto público con presencia de fieles, a la celebración eucarística con presencia de fieles. Damos ahora una grande esperanza a nuestra gente para que poco a poco vayamos volviendo a la normalidad. Pedirles simplemente que se atengan por la gravedad todavía de la situación de contagios que se atengan al protocolo que hemos establecido, y por ello queremos darte las gracias”.

Salvador González Morales, obispo auxiliar arquidiócesis primada de México, informó que se seguirá celebrando y transmitiendo la eucaristía por medios electrónicos, a fin de que aquellos que todavía no puedan estar físicamente en el templo, como adultos mayores y enfermos, se conecten a las transmisiones.

Héctor Pérez Villarreal, obispo auxiliar agradeció a los fieles “porque sabemos que se han quedado en casa y los seguirán haciendo por el bien de ustedes de sus familias y de la sociedad en general. Ánimos, juntos saldremos adelante”.

Franco Rivera Sánchez, obispo auxiliar agradeció a los sacerdotes porque en “todo este tiempo han sabido mantener viva la fe, la esperanza y la caridad en sus comunidades. Aún queda mucho camino por recorrer”.

Carlos Samaniego, obispo auxiliar celebró que los integrantes de la vida consagrada han sido “buenos samaritanos en estos momentos tan difíciles” y Luis Pérez Raygaza, obispo auxiliar destacó que los feligreses se “han tomado muy en serio lo que está por venir, debemos mostrar que estamos preparados para un regreso sumamente responsable y gradual a nuestros templos”.

El presbítero, Jesús Hurtado Hernández, vicario episcopal para el clero, aseguró que los sacerdotes de la arquidiócesis de México “estamos listos para reencontrarnos con ustedes” y Horacio Palacios Santana, vicario de laicos para el mundo destacó que compresión de quienes por su condición entienden que todavía no es tiempo de regresar a nuestras parroquias. “Recuerden que Dios los quiere de vuelta en la iglesia, pero los quiere sanos”.

Fray David Díaz Corrales, vicario episcopal para la vida consagrada, resaltó “haber permanecido unidos y trabajando durante este tiempo de pandemia. Contamos con ustedes par esta nueva etapa que vamos a comenzar”.

Alvaro Lozano Platonoff, vicario episcopal de áreas de pastoral resalto que en la contiengencia sacerdotes y agentes laicos han generado muchas iniciativas que han mostrado una iglesia viva” y Federico Altbach Nuñez, rector del Seminario Conciliar de México agradeció a los seminaristas “que no han dejado de asistir a los grupos más vulnerables”.

Ely Díaz Mera vicario de la Segunda Zona Pastoral remarcó que se debe respetar el aforo establecido para las parroquias, el cual es de 20 por ciento a fin de evitar aglomeraciones y Arturo Barranco Cruz, vicario Cuarta Zona Pastoral, portando cubrebocas y en su parroquia destacó la importancia de mantener “la sana distancia para entrar y salir del templo, al sentarte en las bancas, a la hora de dar la paz y al momento de comulgar”

Pablo Monjaras Wintergerst, vicario Quinta Zona Pastoral indicó que recibir la comunión en la mano “es una medida necesaria y temporal, que nos ayudara a evitar muchos contagios” y José Antonio Carballo, vicario de la Sexta Zona Pastoral, agradeció por “colaborar con tu ofrenda, hoy más que nunca necesitamos de tu ayuda para continuar con nuestra tarea evangelizadora y con la caridad que surge de la iglesia hacia los más necesitados”.

Miguel Angel Urbán, vicario de Sétima Zona Pastoral, indicó que ante las “difíciles circunstancias que estamos viviendo nos permiten, no obstante atrevernos a abrir las puertas de nuestros templos y poder ofrecer al pueblo Dios el sustento espiritual en este momento. Nos toca ser muy cuidadosos responsables y velar siempre por la mejor salud física y espiritual de nuestra gente”.

Salvador Martínez Ávila, vicario de la Primera Zona Pastoral agradeció a la virgen de Guadalupe por “acompañarnos a lo largo de estos días, por ser refugio y consuelo, y concedernos tu amor maternal en este tiempo de pandemia”.

La arquidiócesis de México deseó que “vivamos un regreso alegre y seguro a nuestras iglesias”.