Santiago. El presidente Sebastián Piñera, vapuleado por el Congreso, promulgó el viernes una ley opositora que permitirá a millones de chilenos sacar el 10 por ciento de sus fondos de pensiones en un país empobrecido por la recesión económica desatada por la pandemia, informó un escueto comunicado oficial.

Centenares de chilenos urgidos por dinero se aglomeraron temprano en largas filas —con mascarillas aunque sin distanciamiento social— frente a oficinas de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que gestionan 200 mil millones de dólares de las jubilaciones para pedir las claves necesarias para retirar ahorros la próxima semana. Las AFP dijeron más tarde que no se necesitará la clave.

Una encuesta de la Cámara Nacional de Comercio reveló el viernes que el 60 por ciento de los consultados comprará alimentos con el ahorro para su vejez y los restantes pagarán servicios básicos, préstamos y deudas de educación.

Ana Camayo, desempleada desde hace cuatro meses debido al cierre de los grandes centros comerciales, dijo a The Associated Press que “usaré el poco dinero que tengo para pagar arriendos de la casa y cuotas del colegio de mi hija”.

Piñera intentó con fuerza frenar el proyecto, pero un sector del oficialismo le dio la espalda y entregó los votos indispensables a la oposición para que sacará adelante la iniciativa. El mandatario pudo haberlo vetado o mandarlo al tribunal Constitucional, lo que habría despertado un enorme rechazo ciudadano.

La firma del proyecto se realizó en privado. El siguiente paso es que sea revisado por la Contraloría General de la República y que se envíe a la gaceta oficial, que lo publicaría a comienzos de la próxima semana y se convertiría en ley.

Cuarentenas obligatorias por la pandemia llevaron a la economía a contraerse hasta un -15,3 por ciento en mayo —situación que empeoraría en junio y julio— lo que derivó en que los 700 mil desempleados de marzo se triplicaran hasta dos millones en mayo. Millones perdieron todos o parte de sus ingresos.

Los 11 millones de chilenos que mantienen ahorros en las privadas AFP podrán sacar hasta el 10 por ciento de sus ahorros, con un máximo de cinco mil 600 dólares y un mínimo de mil 300 dólares, en dos cuotas iguales. Se estima que millones de personas retirarán el total de sus escasos fondos.

Estimaciones del Fondo Monetario Internacional indican que el PIB chileno se contraerá un 7,5 por ciento en 2020 y economistas locales dicen que la liquidez que se inyectará al mercado podría reducir entre uno a tres puntos la caída.

El gobierno y los grandes empresarios aseguran que los retiros de los ahorros provocarán una caída en las futuras jubilaciones, especialmente en las más bajas.

El proyecto de uso de fondos prosperó en el Congreso luego de que Piñera, que ha otorgado millones de subsidios al 60 por ciento de los grupos más vulnerables, anunció un paquete de ayuda para parte de la empobrecida clase media --transferencia directa de 600 dólares y un préstamo de hasta dos mil 500 dólares-- que fue considerado insuficiente por la centroizquierda, que empujó su iniciativa.

Las AFP, cuyas páginas en línea estaban caídas o con largas esperas, deben tener la liquidez necesaria para empezar a pagar a quienes pidan hasta el 10 por ciento de sus ahorros.

Las pensiones chilenas se basan en un sistema de capitalización individual de fondos y fue impuesto en 1981 por la dictadura del general Augusto Pinochet, (1973-1990), que prometió que jubilaciones con montos de hasta un 80 por ciento del último sueldo, pero ello jamás ocurrió. El promedio obtiene el equivalente de un 20 por ciento de sus ingresos.