Morelia, Mich. Entre tala clandestina, incendios forestales y cambio de uso de suelo, las comunidades purépechas siguen perdiendo miles de hectáreas de bosque, denunció el Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), luego de anunciar la siembra de 400 mil pinos en las cuatro regiones de los pueblos originarios.
El coordinador del CSIM, Pavel Guzmán, comentó que en al menos 30 comunidades en los años recientes han sembrado aguacate por el negocio que representa, pero el crimen organizado no ha dejado de saquear los bosques, es por ello que se ha perdido 60 por ciento de los recursos forestales.
“Las 60 autoridades comunales que integran el Consejo Supremo en 2019 sembraron con el apoyo del pueblo 600 mil árboles, por lo que estarán sumando un millón de plantas, y sin apoyo de partidos políticos ni de funcionarios gubernamentales y sin pago económico alguno”, apuntó el dirigente de comunidades purépechas.
Dijo que tampoco participa algún programa de gobierno, solo con la ayuda de miles de comuneras, comuneros, jóvenes y niños preocupados por la madre tierra, aunque admitió que las plantas las proporciona la Comisión Forestal del Estado de Michoacán.
Pavel Guzmán subrayó que hay escasez de agua en algunos pueblos originarios, y el cambio de uso de suelo ha traído consigo deslaves y erosión. “Hay pueblos como Santa Cruz Tanaco, Ocumicho y Carapan que se han quedado prácticamente sin bosque; otros han sustituido el aguacate por pinos, sin contar el robo de madera”, apuntó.
Dijo que el saqueo de los bosques continúa y ninguna autoridad de gobierno lo ha frenado, la situación es crítica y se tiene que hacer algo. “Solo basta observar de las partes elevadas de las regiones indígenas para constatar todo el daño que se ha causado al medio ambiente”, subrayó el dirigente indígena.