Ciudad de México. Con los avances logrados hasta ahora en la elaboración de las vacunas anti-Covid por parte universidades, institutos y empresas farmacéuticas en el extranjero, es previsible que estén listas en el último trimestre de este año, pero aún así faltaría enfrentar el problema de su distribución a nivel global, estimó Gilberto Castañeda Hernández, investigador del Departamento de Farmacología del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav).
El especialista, quien desde hace más de 20 años ha estado involucrado en el análisis y evaluación de los medicamentos genéricos en el país, precisó que en el desarrollo de estas vacunas, dos de ellas encabezadas por el Reino Unido y China -aunque también citó dos casos más-, deben ampliar las pruebas a un mayor número de voluntarios.
En entrevista, el científico señaló que tras los resultados, ya no hay duda de que estas vacunas funcionan, creando anticuerpos y provocando inmunidad, pero ahora se debe ampliar el tema de la seguridad a todos las personas que se les aplique. Es decir, dijo, se tiene que hacer pruebas en un número muy grande de voluntarios, y ver que no les ocurra nada que los dañe. Se estima que para garantizar la seguridad de la vacuna deben aplicarse a alrededor de 50 mil personas de diferentes edades y características, incluso raciales y con padecimientos diversos, como la diabetes.
Casteñada Hernández calificó de positivo que sean varias las instituciones y consorcios farmacéuticos que trabajen en estos proyectos, pues se necesitarán al menos seis grandes compañías, debido a que “hay que vacunar a casi todo el mundo; por lo menos al 60 por ciento de la población, para que se asegure que la inmunidad va a funcionar, pues de lo que se trata es que la probabilidad de encontrar a alguien que te pueda contagiar sea muy baja”.
Y es que, añadió, una cosa es elaborar la vacuna y otra tarea su fabricación por millones de dosis y su distribución, por eso, dijo, se dan las alianzas entre las universidades e institutos de investigación con las grandes empresas del sector farmacéutico.
Explicó que junto con los proyectos de las vacunas desarrolladas por la Universidad de Oxford en asociación con la farmacéutica AstraZeneca, en el Reino Unido, y la de CanSino Biologics e investigadores de varios organismos en China, hay otros dos que también han presentado resultados positivos.
Respecto al primer caso, citó que la empresa AstraZeneca ya anunció que en septiembre tendrá 2 mil millones de dosis de vacunas. “Estamos hablando de que quizás en el último trimestre del año estará lista una vacuna, aunque deberemos estar atentos de cuánto tiempo se va a tardar en distribuirse y en poder aplicarse aquí en México.
“Sin duda se va en el camino correcto para encontrar la vacuna. Estamos viendo la luz al final del túnel, pero todavía falta bastante para para salir de él”, indicó Castañeda Hernández, miembro del Sistema Nacional de Investigadores nivel III.
De los otros dos proyectos, recordó que la semana también salió un estudio de una compañía de Estados Unidos de nombre Moderna, en la que muestra que su vacuna produjo inmunidad, aunque se trata de un estudio más pequeño, comparado con la desarrollada en la Universidad de Oxford, en la que se aplicó a 600 personas.
Hay otro proyecto añadió, que viene un poco retrasado pero que sigue su avance; se trata de un proyecto encabezado por la Compañía Pzifer, en una alianza de centro biotecnología en Alemania.