Ciudad de México. Los niños y adolescentes que no reciben ayuda para superar los traumas que generan en ellos la violencia intrafamiliar, quedan “muy expuestos, y fácilmente atraídos, por el odio y la venganza que envenenan el alma”, señaló el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes.
En la misa a puerta cerrada que celebró en la Basílica de Guadalupe, se refirió a este tipo de violencia que también afecta a los menores, quienes en vez de ser amados, “son maltratados y agredidos en su dignidad”.
De igual manera, destacó que la educación “es la herramienta indispensable para ir clarificando nuestra conducta, para ejercitarnos en el buen uso de la libertad, tanto en el ámbito personal como en el social. Es el desarrollo de nuestra inteligencia para el conocimiento de nuestra persona y de los diversos dinamismos de la sociedad”.
La mejor forma de iniciar un proceso educativo -añadió- “consiste en experimentar ser amado. Esta es la tarea del matrimonio y de la familia, ser la cuna del amor para los hijos. Quienes hemos tenido esa maravillosa y fundamental experiencia debemos agradecerla de todo corazón”.
También, durante su homilía el cardenal Aguiar Retes dijo que la doctrina de la Iglesia respeta la vida de todo ser humano “y está en contra de todo lo que atenta”, como el aborto, la tortura y la pena de muerte, pero dijo está de acuerdo en la penalización conforme a la justicia, de los delitos y crímenes.
Por otra parte, ante la reapertura gradual de los templos, que se prevé inicie el 26 de julio, la Arquidiócesis de México, que encabeza Aguiar Retes, destacó que sus recintos “están listos para recibir a los fieles”, no sólo porque se han atendido las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades eclesiales y civiles, “sino porque sabemos que la fe, la esperanza y la caridad son virtudes que deben fortalecerse en este delicado momento de la historia para salir adelante”.
Ante este panorama, pidió a la feligresía respetar la capacidad permitida en los templos, que será de 30 por ciento. “No hagamos aglomeraciones, acatemos las medidas sanitarias, y seamos ejemplo, como Iglesia, de lo que nuestra sociedad necesita en este momento”.
En la editorial que publica hoy en el semanario Desde la Fe, su órgano de difusión, invitó a los católicos a ser corresponsables. “Cuidemos de nosotros y cuidemos del otro. Atendamos a las indicaciones que se han difundido sobre cómo debe ser nuestro retorno y que difundiremos con mayor esmero en las siguientes semanas”.
Recordó que en los últimos días el gobierno de la Ciudad de México realizó una serie de verificaciones a los protocolos de seguridad sanitaria que tendrán los templos de la Arquidiócesis la cual abarcó aquellos lugares que suelen tener la mayor concentración de personas: la Basílica de Guadalupe, la Catedral Metropolitana, el templo de San Hipólito y las parroquias de la Esperanza de María en la Resurrección del Señor, de Nuestra Señora Aparecida de Brasil y de Santo Domingo de Guzmán.
Precisó que los protocolos de dichos recintos son los mismos que el arzobispo Aguiar Retes ha pedido para todos los demás, sean parroquias, rectorías o capillas.