En América Latina y el Caribe, 47.7 millones de personas padecieron hambre en 2019, es el quinto año consecutivo de incremento, según el informe El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2020 (SOFI, por su sigla en inglés). El estudio advierte que la región no alcanzará el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2, ya que las proyecciones indican que el número de individuos que no consume las calorías suficientes para llevar una vida activa y saludable, afectará a casi 67 millones en 2030.
También advierte que la pandemia de Covid-19 puede añadir entre 83 y 132 millones de personas al número total de individuos subalimentados en el mundo en 2020.
En el documento elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre otros organismos internacionales, indica que las estimaciones actuales arrojan que cerca de 690 millones de personas padecen hambre, es decir, el 8.9 por ciento de la población mundial (un aumento de unos 10 millones de personas en un año y de unos 60 millones en cinco años).
De igual manera el número de personas afectadas por la inseguridad alimentaria grave muestra una tendencia ascendente similar, ya que en 2019, cerca de 750 millones individuos, o casi uno de cada 10 en el mundo, se vieron expuestas a esta situación.
“El mundo no está en vías de lograr el objetivo del hambre cero para 2030. Si continúan las tendencias recientes, el número de personas afectadas superaría los 840 millones para 2030”, destaca.
A escala mundial, la carga de la malnutrición en todas sus formas sigue constituyendo un desafío. Según las estimaciones, en 2019 el 21.3 por ciento (144 millones) de los niños menores de cinco años sufría retraso del crecimiento, el 6.9 por ciento (47millones) padecía emaciación y el 5.6 por ciento (38.3 millones) tenía sobrepeso.
En América Latina el 7.5 por ciento de los menores de 5 años viven con sobrepeso, cifra significativamente mayor que el promedio mundial.
A nivel subregional, se prevé un aumento de 3 puntos porcentuales en el hambre en América Central para 2030, es decir, 7.9 millones de personas. En América del Sur, la proyección es que el hambre aumentará a 7.7 por ciento, lo que equivale a casi 36 millones de personas. Aunque el Caribe ha logrado avances, tampoco está en la senda para alcanzar el objetivo de reducción del hambre ya que se estima que en 2030, 6.6 millones personas vivirán con hambre en esa zona.
El representante regional de la FAO, Julio Berdegué,, señaló que “las cifras de hambre en el año 2019 son escalofriantes, como también lo es el pronóstico para el año 2030. Con el impacto de la pandemia de la Covid-19 la realidad será peor que la que proyectamos en este estudio. Necesitamos una respuesta extraordinaria de los gobiernos, del sector privado, la sociedad civil y las organizaciones multilaterales”.
