Ciudad de México. A partir de mayo aumentaron los casos sospechosos de Covid-19 en México, los cuales corresponden a personas con síntomas de la enfermedad en espera del resultado de la prueba de laboratorio. Hasta el sábado pasado la cifra era de 78 mil 393, casi cuatro veces más que hace dos meses, cuando la Secretaría de Salud (SSa) identificó el problema y señaló que se debía a factores como deficiencias en la toma de las muestras y en la captura de los resultados en la plataforma del Sistema de Vigilancia de Enfermedades Respiratoria (Sisver).

Aunque el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, comentó que el retraso en la notificación de los casos confirmados puede ser de 10 días, en promedio, en las estadísticas que a diario se actualizan en la página www.coronavirus.gob.mx siguen como sospechosos casos reportados en marzo, abril, mayo y junio.

El funcionario explicó en una de las conferencias vespertinas en Palacio Nacional que las razones de la tardanza van desde que la muestra se tome en fin de semana y hay que esperar al lunes para enviarla al laboratorio, hasta la distancia entre la unidad médica y el lugar donde se realizan los estudios y en ocasiones ocurre que las muestras no son adecuadas para el análisis. 

Revisión a la base de datos

Lo que hasta ahora no se ha comentado es si existe algún número o porcentaje que se considere como aceptable para el rezago en la información, pues a partir de una revisión de la base de datos oficial destaca que hay entidades donde los casos sospechosos representan 40 por ciento o más respecto de los confirmados. Hasta el pasado sábado se encontraban en esta situación Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y San Luis Potosí, entre otros.

La tendencia de casos confirmados es uno de los indicadores indispensables para la toma de decisiones en torno a la pandemia, y en el caso de México es uno de los cuatro que se utilizan para determinar el color del semáforo de riesgo de Covid-19 en cada entidad.

Por eso, durante algunas semanas y hasta el pasado 3 de julio se incluyó en el reporte diario una gráfica de barras con los casos sospechosos en cada estado y las instituciones a las que correspondían. La mayoría del rezago estaba en los servicios estatales de salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social.

Solución al retraso

Desde el jueves 4 de julio, el reporte cambió de tal manera que la tendencia de la epidemia se representa sólo con las estimaciones de casos activos y sospechosos. De estos últimos, la Dirección de Epidemiología calcula la cantidad de los que eventualmente se confirmarán como Covid-19. Así resuelve el atraso en las confirmaciones de casos de la infección.

En diferentes foros, expertos de las organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud han señalado la importancia de contar con la información actualizada, sobre todo para la etapa del desconfinamiento. El viernes pasado, el subsecretario López-Gatell atribuyó a inconsistencias en la información que envían los estados al Sisver como la causa de que no se presentara el semáforo que debería entrar en vigor este lunes, pero no explicó a qué se refería.