El gobierno de Estados Unidos ya respondió a su contraparte mexicana la nota diplomática relacionada con el operativo Rápido y Furioso.
En el marco de la visita de trabajo del presidente Andrés Manuel López Obrador a Washington, el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, confirmó a un grupo de periodistas que el lunes pasado se envió la respuesta a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
El diplomático dijo que en la respuesta habla por sí misma. “Se contestó y la respuesta está dentro de la respuesta. Speaks for itself” (habla por sí misma), indicó.
El 11 de mayo pasado, a través de la cancillería, el gobierno mexicano solicitó al de Estados Unidos toda la información disponible sobre el operativo Rápido y furioso –que inició a finales de 2009, durante el gobierno de Felipe Calderón.
En la nota diplomática, se subrayó que si dicho operativo se ejecutó sin el conocimiento de las autoridades mexicanas del más alto nivel, la administración estadunidense habría incurrido en una violación a la soberanía. Y si la gestión de Calderón supo y lo autorizó, “estaríamos ante graves violaciones a la Constitución, pues mintió al Congreso de la Unión y a la sociedad”.
En el documento, firmado por el canciller Marcelo Ebrard Casaubon, se remarcó que la información reque-rida es la relacionada con las más de 2 mil armas que entraron a territorio mexicano como parte de la operación y de las declaraciones hechas por los procesados del caso.