Ciudad de México. La baja en la demanda de servicios aéreos en el mundo podría recuperarse en 2022, aseguró Enrique Beltranena, director general de Volaris. Destacó que esta previsión parte del comportamiento de los mercados europeos y asiáticos que llevan dos meses por delante en la crisis sanitaria de Covid-19.
Al cierre de este año la demanda mundial de pasajeros podría recuperarse al 65 por ciento frente a 2019, para 2021, 85 por ciento, y en 2022 haberse restablecido del todo. Lo que sumado a los efectos que tengan el tipo de cambio y el costo de la turbosina –ahora bajo dada la caída del precio del petróleo- pueden ayudar a la recuperación del sector.
Volaris ha surcado la crisis de Covid-19 –aparentemente con menos afectaciones que otras aerolíneas mexicanas- debido al estado en que se encontraba previo a la crisis y su modelo de negocio ya acotado en gastos, explicó Enrique Beltranena, director general de la empresa.
El directivo detalló que antes de los cierres económicos que tiraron la demanda del sector, la empresa contaba con 450 millones de dólares en caja, recursos que tres meses después se mantienen prácticamente en el mismo nivel dado que se tienen los segundos costos de operación por pasajero más bajos en el mundo y los más bajos en América.
La reestructura estuvo enfocada a pedir aplazamiento con los arrendadores de aeronaves, dado que el 50 por ciento del costo fijo con el que opera la empresa responde a la renta de aeronaves, la otra mitad es el pago a la fuerza de trabajo, la cual tiene un sueldo base bajo que incrementa dado el volumen de operaciones.
Sin la emergencia de mantener sueldos altos a sus trabajadores, la administración de Volaris se enfocó en la renta de aeronaves y logró negociar 4.2 meses de retraso en obligaciones que al final se pagarán en los siguientes 24 meses. Además tuvo que compensar o reembolsar a un millón y medio de pasajeros cuyos vuelos fueron suspendidos.
En cuanto a los protocolos de bioseguridad, urgió que toda la industria homologue con base en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo. “Eso va a hacer que la confianza se restablezca”, sostuvo el funcionario.
Por su parte, Enrique de la Madrid, secretario de Turismo en la administración de Enrique Peña Nieto, dijo que la crisis vino en un momento “muy inoportuno” dado que la economía mexicana y el sector de las aerolíneas ya habían sido afectados con la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.
Detalló que si bien algunas aerolíneas en el mundo se han sumado a reestructuraciones al cobijo del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos –como el caso de la mexicana Aeroméxico- una de cada tres empresas que entra al proceso no sale de él y por eso algunos gobiernos están dado apoyo adicional dada que la aeronáutica es industria esencial.
“En México me da la impresión de que el gobierno se va a quedar pasmado, nada más viendo”, arengó el exfuncionario.