“Puedo decirles que la libertad de este señor –a quien no mencionó expresamente–, presunto responsable de la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa, entre otros delitos, tuvo que ver con un acto de corrupción del juzgado donde se le otorgó la libertad”.

Aseguró que se tienen las pruebas que demuestran esta irregularidad, la cual calificó como una afrenta a las instituciones y al Estado.

Sin pregunta de por medio, el Presidente censuró la decisión del juzgado segundo de distrito en materia penal, a cargo de Rosario Castillo –cuyo nombre tampoco mencionó–; destacó que hay un trabajo coordinado entre el Poder Judicial, la Fiscalía General de la República (FGR) y el Ejecutivo para el caso de Ayotzinapa que interesa a todos, por lo que se inició la investigación sobre las razones de la liberación de El Mochomo para castigar a los responsables, pues hubo dinero de por medio.

En otro orden de ideas, el mandatario consideró que la repatriación de este señor (Emilio) Lozoya, permitirá esclarecer muchas cosas, pues además de representar un acto de justicia, independientemente del castigo, permitirá “ventilar estos asuntos, que la gente sepa, se socialice la información de cómo era el modus operandi durante el llamado modelo neoliberal, cómo era la corrupción, para que no se repita”.

Al abundar en torno a la liberación de El Mochomo, dijo que desde temprano, en la reunión del gabinete de seguridad se recibió el reporte que advertía sobre la corrupción en el juzgado. Enfatizó que no fue un caso de rutina que involucrara a un agente del Ministerio Público, “y el juez libera; estamos hablando de que el fiscal general de la República hizo el anuncio, y en muy poco tiempo lo dejan en libertad; yo creo que ni tardó 24 horas, porque a las 12:00 de la noche lo soltaron.

–¿Caería el juez?

–Debe castigarse a los responsables. Es un delito gravísimo, por lo que espero que se actúe, y también que se ventile para que la gente lo sepa, porque la justicia no es sólo castigar al responsable, también es evitar la repetición del acto ilícito.

Confió en que la FGR aporte todas las pruebas en el caso y se dé a conocer que una prueba, tenga que ver con la corrupción o por el debido proceso, queda nulificada; mi opinión es que no le hace, pero que se conozca, que la gente se entere. Seguramente habrá otras pruebas.

López Obrador aseveró que ya hubo cambios en el Poder Judicial, definiendo al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, como un hombre íntegro, con vocación justiciera, quien ha hablado de combatir la corrupción.

En relación con el caso Lozoya, el mandatario señaló que deberá esclarecerse el entramado de sobornos que se registró para entrega de obras, someter a legisladores, comprar a todo el que se dejaba a costillas del erario, en particular en la compra de la planta de fertilizantes con sobreprecio de 200 millones de dólares. Además, se buscará restituir esos recursos y devolverle al pueblo lo robado.