La Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) de México confió en que Aeroméxico esté tomando la mejor decisión para todos y que los esfuerzos fortalecerán el futuro de la aviación en el país, luego de que la empresa anunciara ayer que junto con algunas de sus filiales comenzaron un proceso voluntario de restructuración, bajo el Capítulo 11 de la ley de quiebras de Estados Unidos, mientras continúa ofreciendo servicio.
Ricardo del Valle, secretario general de ASSA de México, señaló que los planes de Aeroméxico para reactivar las operaciones permanecen vigentes" y que "hoy más que nunca" persiste el compromiso de seguir trabajando, cuidando de la salud y seguridad en general.
"Hemos sido informados por Grupo Aeroméxico que por acuerdo de sus accionistas se tomó la determinación de iniciar en la corte federal de Estados Unidos radicada en la ciudad de Manhattan, Nueva York, un proceso de restructura financiera en términos del Capítulo 11 de las leyes federales de este país.
"Este proceso tiene como finalidad que la empresa, con la protección de la Corte, logre un convenio con sus acreedores financieros que le permita reorganizar los términos de pago de las deudas que la compañía tiene contratados con diferentes entidades financieras a nivel internacional, de modo que pueda continuar sus operaciones de transporte de pasajeros, manteniendo su capacidad operativa, y permaneciendo como fuente de trabajo de todos sus empleados, entre ellos, los sobrecargos que formamos parte de esta gran empresa".
En un comunicado, agregó que Aeroméxico tomó esta determinación a partir de las dificultades financieras causadas a partir del surgimiento de la pandemia generada por el Covid-19, que afecta al mundo y en particular a México desde marzo de este año, la cual provocó la disminución casi total de las operaciones de la empresa, lo que originó complicaciones financieras para que la empresa cumpla con los términos de los adeudos contratados con sus acreedores financieros.
Por su parte, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) respaldó la decisión de Aeroméxico para adherirse al Capítulo 11 del Código de Bancarrota de Estados Unidos.
Señaló que el Capítulo 11 es una herramienta jurídica que le ofrecería a Grupo Aeroméxico reorganizar su negocio y llegar a acuerdos con sus acreedores continuando la operación, lo que permite a una empresa sanear sus finanzas y dar continuidad a la fuente de empleo.
"Los pilotos de ASPA estamos convencidos de que la responsabilidad para afrontar correctamente esta crisis es compartida entre accionistas, directivos y trabajadores"
ASPA de México recordó que continúa negociando, a solicitud de la empresa, un esquema de ayuda económica que contempla las necesidades reales de los trabajadores y de las aerolíneas del grupo, por lo que están atentos al panorama, toda vez que, dijo, sus contratos colectivos de trabajo están amparados únicamente por las leyes mexicanas.
"Es importante que nuestros pasajeros no tengan duda de que en ASPA somos pilotos profesionales y solidarios con nuestras empresas, así lo hemos demostrado durante los más de 60 años de vida de nuestro sindicato. Confiamos en que encontraremos esquemas que favorezcan a las fuentes de empleo y apoyen en la exitosa reestructura de Grupo Aeroméxico", añadió.