Elementos federales detuvieron en Metepec, estado de México, a José Ángel Casarrubias Salga-do, alias El Mochomo, líder del grupo delincuencial Guerreros Unidos, implicado en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, Guerrero.
De acuerdo con fuentes cercanas al caso, su detención –concretada el miércoles de la semana pasada– es relevante y pieza clave
, ya que al parecer era uno de los principales líderes del grupo delictivo responsable de la desaparición de los normalistas.
El imputado fue detenido en un operativo conjunto de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (Sspc), en cumplimiento de una orden de aprehensión librada por un juez federal del estado de México, por el delito de delincuencia organizada.
Luego de su captura fue trasladado al Centro Federal de Readaptación Social Número 1, en Almoloya de Juárez, donde este martes comparecerá a su prime-ra audiencia.
Según las investigaciones sobre la desaparición de los normalistas, Guerreros Unidos fue el grupo que, en colaboración con policías municipales de Iguala, secuestró a los normalistas la noche del 26 de septiembre de 2014.
Las líneas de investigación apuntan a que Guerreros Unidos cobraba protección al presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca, quien habría dado las órdenes para que procedieran contra los 43 normalistas.
En los mensajes de texto que miembros de esa organización criminal intercambiaron con sus secuaces en Chicago (que fueron interceptados por la DEA), Casarrubias Salgado aparece como uno de los interlocutores. De acuerdo con los expedientes, al ahora detenido se le identifica en esas conversaciones de chat con el mote de Soldado del amor, y con quien tuvo más comunicación fue con su hermano Adán Zenén, quien aparece como Silver, y quien fue detenido posteriormente, al igual que sus otros hermanos: Sidronio y Mario.
Tras darse a conocer la detención, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, una de las organizaciones que acompañan a los padres de los estudiantes, indicó en Twitter que se trata de una relevante aprehensión, que “puede contribuir al esclarecimiento del caso (…) Es fundamental que se incentive su colaboración con la investigación del paradero de las víctimas y que se sigan indagando los vínculos de su familia y su organización criminal con las fuerzas de seguridad de los tres niveles de gobierno”.
Las fuentes consultadas señalaron que el detenido quizás sepa algo más que lleve a dar con el paradero de los jóvenes
, quienes fueron víctimas de desaparición forzada entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
En 2015, la FGR ofreció un millón y medio de pesos de recompensa por cualquier información que llevara a la captura de José Ángel, quien apenas la semana pasada promovió un amparo en contra de cualquier orden de aprehensión librada en su contra, pero fue negada por considerarse un delito grave.