Ciudad de México. La sesión extraordinaria de la Cámara de Diputados del martes se centrará en las minutas que le envíe el Senado para adecuar un paquete legal al tratado comercial de América del Norte (T-MEC) y la declaratoria para reanudar el proceso de elección de cuatro consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE).
La jornada se alargará por el método escalonado de votación de los dictámenes: a los diputados se les llamará al pleno en orden alfabético en tandas de 50 para evitar la concentración en el pleno.
Así, cada votación se alargará una hora, mientras que a las dictámenes se les dispensarán todos los trámites -no pasarán por comisiones- y las posiciones e intervenciones de los diputados se reducirán en la tribuna.
La Comisión Permanente aprobó hoy la realización de un segundo periodo extraordinario en la Cámara de Diputados, a partir del 22 de julio, para elegir a los cuatro consejeros del INE, que concluyeron su periodo en abril
Finalmente no se reunió la Comisión de Presupuesto, al no existir condiciones para aprobar la reforma a la Ley de Presupuesto para que el presidente pueda reorientar hasta 10 por ciento del presupuesto; como había anunciado, Morena volvió a presentar una iniciativa sobre el mismo tema ayer.
También quedó fuera la iniciativa morenista para extinguir los fideicomisos, a pesar de la advertencia que el coordinador de esa bancada, Mario Delgado, hizo a la oposición, respecto de que si vetaban esos temas y no se incluían en el periodo, en septiembre ya no buscará consensos, sino que el grupo impondrá su mayoría.
Los grupos parlamentarios prevén que el debate de las minutas del Senado para actualizar la legislación mexicana al TMEC se desarrolle sin discusión.
Como protocolo para reducir el riesgo de contagios de Covid-19 en el pleno sólo habrá 51 diputados -26 de Morena, 8 del PAN, 5 del PRI, 4 del PT, 3 de MC al igual que PES, y uno del PVEM y otro del PRD- y el resto aguardará en sus oficinas, en tanto se desarrolla la sesión y se les llama a votar.
Para agilizar el ingreso al salón de plenos se inhabilitarán los lectores de huellas digitales, se acotará el ingreso a funcionarios y asistentes de legisladores, mientras que el estacionamiento subterráneo será utilizado solo por diputados.