Ciudad de México. El presupuesto para la construcción del Vivero Forestal Tapachula, encomendada a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por la Secretaría de Bienestar, tuvo que ser incrementado en un 5.95 ciento debido a las diferencias entre la relación peso-dólar, aunque esta paridad ha superado ya el 15 por ciento desde que arrancó el proyecto.
El 27 de julio del año pasado, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador acudió a Chiapas para dar arranque a la construcción, se anunció que se invertirían en él 188 millones de pesos, sin embargo, el convenio respectivo firmado entre ambas dependencias, el 18 de febrero de este año, fue por 199 millones 894 mil 983 pesos.
Respecto a la diferencia, fuentes de la Sedena explicaron que se debe a la previsión del movimiento del tipo de cambio, pues se requiere la importación de equipos e insumos provenientes de los Estados Unidos.
Se trata de un vivero capaz de producir hasta 40 millones de brotes viables de árboles frutales y maderables, destinados para el programa Sembrando Vida en México, e incluso para su envío a países de Centroamérica, como Guatemala, Honduras y El Salvador.
El acuerdo firmado por el director general de ingenieros de la Sedena, Salvador Fernando Cervantes Loza, y el director general de instrumentación de programas agroforestales de la Secretaría de Bienestar, Julio César Gerónimo Castillo, establece que el proyecto debería desarrollarse en un tiempo total de 180 días naturales después de haberse depositado los recursos respectivos, lo cual significaría que originalmente se concluiría en agosto próximo.
El documento también señala el retraso por posibles imprevistos, y en su cláusula segunda, la necesidad de recursos adicionales, los cuales podrían gestionarse solo “previa justificación”.