Ciudad de México. La baja en el número de pasajeros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), a raíz de la pandemia de Covid-19, implicó que los ingresos por la tarifa de uso de aeropuerto (TUA) se desplomaran 44.11 por ciento entre enero y mayo de este año, respecto de 2019.
Con ello se reducen los recursos con los que cuenta el gobierno federal para pagar la deuda anual de 221 millones de dólares –más intereses–, parte de las obligaciones adquiridas por la pasada administración para levantar el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM) en Texcoco, y que aún deberán pagarse por 18 años más con cargo al tránsito aéreo que parta de la capital.
Según el AICM, de enero a mayo el número de pasajeros que partieron de esta instalación –a los que se cobra la TUA– fue de 3 millones 749 mil 197, en vuelos nacionales, y un millón 855 mil 293, en internacionales. Las cifras reflejan una caída de 42.63 y 47.47 por ciento, respectivamente, frente a lo reportado en el mismo periodo del año anterior.
La baja en las operaciones se resiente en los recursos con los que debe responder la Federación a la deuda de 4 mil 200 millones de dólares que dejó el proyecto, pese a que en diciembre de 2018 se compraron a inversionistas mil 800 millones de dólares para reducir el volumen de una obligaciones por 6 mil millones de dólares a pagar hasta en 30 años.
Hasta mayo, el AICM había recaudado 176 millones 74 mil 431.51 dólares vía TUA, con un precio de 24.21 dólares en viajes nacionales y de 45.98 dólares en internacionales, un desplome de 44.11 respecto de los 315 millones 44 mil 950 que captó en el mismo periodo de 2019.
La baja es tanto en vuelos nacionales como internacionales. El año pasado, por volar del congestionado Benito Juárez a otros aeropuertos del país, se recaudaron 155 millones 467 mil 293 dólares en los primeros cinco meses del año y por vuelos internacionales, 159 millones 577 mil 657 millones más. Pese al alza en la TUA, los efectos de la pandemia hundieron esta captación a 90 millones 768 mil 59 dólares y 85 millones 306 mil 372, respectivamente.
La TUA del aeropuerto capitalino está entre las más caras del mundo, lo que incide en el costo de los boletos de avión. Ello, en parte es herencia del negocio del NAIM. Antes de decidirse construir éste, el impuesto por volar se ajustaba con la inflación, pero en 2014 , cuando se acordó financiar el aeropuerto de Texcoco con deuda privada –que a su vez se financiaría con este impuesto adjunto al boleto de los pasajeros– la tarifa despuntó 74 por ciento.