A partir de esa fecha el Comité de Representación acató las recomendaciones de las autoridades federales; de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y del Sector Salud. También, en un ejercicio de responsabilidad, difundió entre sus agremiados las campañas Quédate en casa, Sana distancia y las prácticas de higiene pertinentes.
En necesario señalar brevemente el historial del Tianguis Cultural del Chopo sobre las diferentes etapas de crisis que ha vivido, como el desalojo del Museo Universitario del Chopo, la época itinerante durante casi cinco años y los diferentes conflictos que ha sorteado en su actual ubicación: un intento de desalojo por la construcción de la Biblioteca José Vasconcelos; la lucha permanente con ambulantes oportunistas protegidos por individuos cercanos a la alcaldía, y sobreponerse a la actual delincuencia generalizada.
Ante este panorama y las dudas sobre la fecha de la apertura de actividades, Felipe Victoriano, integrante de la Comisión Tripartita de Representación del tianguis, señala: “A principios de la próxima semana, con Cristian Pacheco, funcionario de la alcaldía Cuauhtémoc, vamos a decidir cuándo nos instalamos, si el 27 de junio o el cuatro de julio. Esta última fecha es la más probable porque tenemos que cumplir ciertos requisitos para hacerlo. Nuestra idea es dejar un metro de separación entre puesto y puesto y cumplir totalmente con la normatividad. Con base en esto, no hay problema con las autoridades. Ellas nos decían que nos instaláramos de manera gradual, es decir, separar el tianguis, un sábado la mitad y la otra en domingo.
Les dijimos que esto no era posible porque era romper la hegemonía del tianguis. Aceptaron que nos instaláramos todos, pero entre los compañeros surgió la propuesta de decirles a las autoridades que nos dejen trabajar también los domingos como forma de recuperarnos, aunque en realidad no creo que vendamos ni 50 por ciento de lo que se vendía. Sí, nos va a costar mucho trabajo recuperar la dinámica del Tianguis Cultural del Chopo.
Plan de instalación
“De hecho, se van a suspender los conciertos y ocuparíamos esa área; además; nos colocaríamos desde el eje 1 norte, del lado de la biblioteca Vasconcelos, y vamos a cancelar parte del corredor cultural para acomodar a los compañeros. Pero lo importante es que queremos dar seguridad a los asistentes con nuestro protocolo de seguridad, que incluye la sana distancia, no sólo de los visitantes, sino también de los locales. Además, cumplimos con los requisitos de usar cubrebocas, gel y vamos a adquirir –si es posible– termómetros digitales infrarrojos para tratar de garantizar que los asistentes y los compañeros estén bien. Sobre todo, a los del tianguis vamos a revisarlos para que no propaguen nada. A nuestro protocolo le agregamos más aspectos de los que marcan las autoridades. Todo esto ya se entregó a la alcaldía; ya sólo es implementarlo. Lo más importante para nosotros es la seguridad de los visitantes y la de nosotros mismos. Pero sí es claro que la urgencia de los tianguistas es vender, aunque saben que también es importante cumplir con nuestras medidas de higiene y seguridad”, detalló Felipe Victoriano, representante del tianguis roquero y cultural de la zona de Buenavista.