Ciudad de México. El 70 por ciento de los empleos formales que se perdieron en el marco de la emergencia sanitaria son de jóvenes de hasta 29 años, indicaron integrantes de la Alianza Jóvenes con Trabajo Digno conformada por organizaciones civiles y expertos en temas de juventud y en materia laboral.
Durante una conferencia organizada por el grupo Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, Andrea Méndez, de la fundación Forge señaló que la tasa de desempleo nacional se elevó a 34 por ciento en abril, incluyendo a quienes están en la desocupación y quienes están disponibles.
La tasa de desempleo en jóvenes fue del 41 por ciento, en contraste con un 28 por ciento a quienes están en un rango de edad de entre 30 y 46 años de edad.
“La pérdida de empleos es gravísima para todos, pero más para jóvenes, que ya de por sí tenían mayor nivel de desempleo desde antes de esta emergencia. La brecha del desempleo para jóvenes, que ya era grande antes del Covid-19, se hizo más grande”, agregó.
Por su parte, Daniela Dorantes, de Servicios a la Juventud A.C. explicó que de acuerdo a los datos del Observatorio de Trabajo Digno de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, el panorama laboral es muy negativo para jóvenes entre 16 y 30 años, incluso antes de iniciar la emergencia sanitaria.
El 67 por ciento de jóvenes ocupados, es decir, 9.4 millones de personas, no logran ingresos suficientes para cubrir el costo de la canasta básica de una familia de dos personas.
Además, el 61 por ciento no cuenta con seguridad social, y 1.1 millones está subempleado.
Más de la mitad no cuenta con salarios estables ni cuenta con afiliación sindical. Además, un cuarto de los jóvenes trabajadores labora jornadas excesivas, y casi la mitad no cuenta con prestaciones.
Los integrantes de la Alianza Jóvenes con Trabajo Digno hicieron un llamado a los gobiernos, empresarios y a la sociedad a no cerrar la puerta al mundo laboral a los jóvenes, ya que recordaron que hacerlo también impacta en los ingresos de sus familias, y afecta en las comunidades donde viven.