Ciudad de México. El titular del capítulo mexicano del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos México) de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), el arquitecto Saúl Alcántara Onofre, envió el pasado 12 de junio, una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador, en la que, ante “la drástica reducción presupuestal al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)”, manifestó su preocupación sobre dicha cuestión; así como su solidaridad a esa institución.
Esos recortes, apuntó Alcántara Onofre, “se traducirán en la consecuente disminución de programas y proyectos que atañen directamente a la conservación del patrimonio cultural, que es la identidad de los mexicanos, así como en diversas carencias en la formación de los cuadros de jóvenes profesionales necesarios para ese noble fin.
“Entendemos que las consecuencias de la terrible pandemia de la Covid-19 que nos ha tocado vivir, la cual tiene enclaustrada a la mitad de la humanidad, también atañen a nuestra organización, al grado de que todos los comités en los Estados Parte se hallan en la búsqueda de las mejores prácticas para atender sus efectos tanto directos como colaterales”, apuntó Alcántara Onofre.
“Sin embargo, en México no deben ser paliados sustrayendo valiosos recursos a instituciones que, como el INAH, históricamente han sobrevivido con poco. Al contrario, la enorme riqueza patrimonial de México debería ser potenciada apoyando al INAH en la generación de proyectos sustentables de la mano con las comunidades originarias, haciendo una versión efectivamente creativa de la convivencia entre el patrimonio y las necesidades del presente.
En su misiva, el especialista destacó que el INAH “ha sido para México y el mundo, un referente oficial de la salvaguardia del patrimonio cultural, y en específico de los monumentos arqueológicos, históricos y paleontológicos que se encuentran en su extenso territorio”.
Desde la Unesco, señaló, “se visualiza al INAH como la entidad profesional y académica que atiende el todo, y en particular investiga, conserva y difunde los veintinueve sitios culturales mexicanos incluidos, hasta ahora, en la Lista del Patrimonio Mundial, cuidando celosamente, con sus profesionales e investigadores que las condiciones de autenticidad e integridad no sean alteradas, y por ende su valor universal excepcional sea mantenido”.
México ha tenido siempre una responsabilidad histórica con la Unesco, recordó el especialista, “asumiendo las convenciones y tratados internacionales que emanan de sus diferentes órganos consultores, los cuales, advirtió, son vinculantes en el marco del derecho internacional para México y los Estados Parte”.
El Icomos Mexicano, concluyó su carta el titular de ese organismo, dirigida al presidente López Obrador, “se solidariza con la existencia, los apoyos presupuestales y humanos necesarios del INAH y en su carácter de organismo asesor de la Unesco, pone a disposición del Estado Mexicano toda su experiencia y entrega para lograr ese fin.