Mexicali, BC. El gobernador Jaime Bonilla Valdez acusó a Carlos Armando Reynoso Nuño de ser integrante de la mafia de casineros que se enriquecieron durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), cuya administración les autorizó establecer casas de apuestas.
En videoconferencia que emitió desde Tijuana, Bonilla Valdez –emanado del partido Morena— dijo que “en los últimos dos minutos del gobierno de Calderón”, Reynoso Nuño aprobó 100 permisos a casinos.
Anunció que presentará una denuncia contra Carlos Armando Reynoso por los permisos que emitió al casino Royale de Monterrey, Nuevo León, donde fallecieron 52 personas en un atentado de la delincuencia organizada perpetrado el 25 de agosto de 2011.
Reynoso Nuño fue subsecretario de Gobierno en el último tramo de la administración estatal de Francisco Vega (2013-2019) y colaboró en los gobiernos que encabezaron en Baja California Ernesto Ruffo (1989-1995), Héctor Terán (1995-1998) y José Guadalupe Osuna (2007-2013), todos ellos panistas. En el gobierno federal de Calderón Hinojosa fue titular de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación.
Bonilla Valdez también imputó a Reynoso Nuño incurrir en influyentismo, al obtener permisos de uso de suelo para la cervecería Insurgentes en un área cercana a un hospital, y aseguró que la empresa arrojó al drenaje desechos de cebada de su producción artesanal, lo que dañó el ambiente de Tijuana.
Jaime Bonilla atribuyó a Carlos Armando Reynoso encabezar una campaña de desprestigio en redes en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador, y advirtió que “para tener la lengua larga, hay que tener la cola corta”.