En un esfuerzo conjunto el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y empresas del sector privado, lanzaron la campaña “Alimentos saludables para cada niño”, con el que busca beneficiar a 40 mil familias y cerca de cien mil niños, niñas y adolescentes, afectados por el contexto económico que ha generado la pandemia del nuevo coronavirus.
En videoconferencia, Christian Skoog, representante en México de Unicef, destacó que la epidemia de Covid-19, no sólo generó una emergencia sanitaria, sino una grave afectación a la economías de los hogares más vulnerables que enfrentan el riesgo de caer en una mala nutrición por la pérdida de ingresos.
Recordó que en México, el 20 por ciento de los hogares padece carencia alimentaria, mientras que la desnutrición crónica afecta a casi el 15 por ciento de niños y niñas menores de 5 años, y el sobrepeso y obesidad a más del 35 por ciento de la infancia.
María del Rocío García Pérez, titular del Sistema Nacional DIF, detalló que se busca apoyar a 40 mil familias por espacio de dos meses con la entrega de una canasta alimentaria o de una tarjeta para la compra de alimentos sanos.
La iniciativa, que arrancará este 16 de junio, beneficiará, en una primera etapa a 8 mil familiares a de Mexicali, e igual número en Tijuana, Baja California, quienes recibirán una tarjeta con crédito de 590 pesos para la compra de frutas, verduras, atún en agua, leche deslactosada y huevo, entre otros productos.
En el municipio de Nezahualcóyotl, estado de México se distribuirán mil canasta y 4 mil 333 tarjetas; en la región Centro-Tabasco, el mismo número de canastas y tarjetas, así como 5 mil 333 tarjetas en el municipio de Benito Juárez, Quintana Roo. García Pérez alertó que no se podrán comprar alimentos ultraprocesados, dulces ni alcohol.
Lina Pohl, representante en México de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura FAO, destacó que las canastas irán acompañadas de tarjetas informativas sobre alimentación sana, lactancia y ejercicio, pues destacó que la pandemia de Covid-19, generó un impacto “enorme para las familias de escasos recursos” y estimó que se han perdido al menos dos décadas en la lucha contra el hambre y la pobreza en América Latina y el Caribe.
Los beneficiarios de las tarjetas, explicó la titular del DIF nacional, podrán comprar alimentos básicos en dos cadenas de supermecados, quienes colaboran con este esfuerzo. Sin embargo, indicó que para poder llegar a la meta de entregar 80 mil apoyos alimentarios se requiere de la colaboración de ciudadanos que puedan hacer donaciones para cumplir la meta.