Mérida, Yuc. Pese a que la tormenta tropical Cristóbal ya abandonó la Península, en Yucatán todavía se viven las consecuencias de su paso. El meteoro dejó incomunicadas a 22 comunidades del Estado y aún muchas de ellas continúan bajo agua, gran cantidad de sus habitantes permanecen en refugios temporales, en tanto en la comisaría de Santa María, Yaxcabá, un hombre perdió la vida a causa de las inundaciones.
A fin de atender las necesidades de la población, personal del séptimo Batallón de Ingenieros de Combate, perteneciente a la 32/a Zona Militar de Valladolid, recorre actualmente las localidades de Dzilam González y Dzidzantún donde, según reportó la soldado Grecia Carrillo, están atendiendo a más de 40 casas que aún permanecen bajo unos 80 centímetros de agua. En el mercado de Dzidzantún se instaló una cocina comunitaria, la que proporcionará tres mil comidas diarias.
Ese mismo cuerpo emplazó, el sábado en el centro de Tekax, un comedor comunitario para alimentar a siete mil 500 personas, así como una planta potabilizadora que genera mil litros de agua purificada por hora.
También en coordinación con el Ejército Mexicano se instalará en Xul, Oxkutzcab, una planta potabilizadora, con capacidad para generar ocho mil litros diarios, con la que se surtirá del vital líquido a los habitantes de poblaciones cercanas, ya que debido a la falta de energía eléctrica los cárcamos no están funcionando.
Recorrido de Vila Dosal
Por su parte, el gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal realizó un intenso recorrido por el sur de Yucatán, acudiendo a comunidades como Oxkutzcab y Tekax, en donde el nivel del agua por las lluvias ocasionó graves pérdidas en casas y cultivos, así como la incomunicación de las poblaciones que quedaron, además, sin servicios de electricidad y agua potable.
Vila Dosal indicó que, conforme a datos preliminares, se estima que el 85% de los cultivos del estado son pérdida total, situación que afectará a miles de familias yucatecas, al tiempo que recordó a los pobladores que en cuatro días cayó el 40 por ciento de la lluvia que normalmente se recibe en un año.
El mandatario estatal distribuyó ayudas alimentarias, maíz para autoconsumo y agua purificada en las comisarías de Xul y Huntochac, del municipio de Oxkutzcab, y San Agustín, Benito Juárez y San Felipe de Tekax, en donde reiteró el apoyo de su gobierno a las comunidades.
En cada uno de estos lugares, los hombres y mujeres del campo refirieron que se perdieron todas las cosechas de hortalizas, soya y maíz, así como colmenas de productores apícolas.
En la comisaría de San Felipe, perteneciente al municipio de Tekax, comunidad que aún se encuentra incomunicada por las elevadas inundaciones, los habitantes explicaron que se perdieron por lo menos 210 hectáreas de siembra de soya y maíz que estaban a punto de ser cosechadas.
El titular del Ejecutivo estatal también acudió a la comisaría de Yotholín, en el municipio de Ticul, otra de las comunidades muy afectadas, donde las fuertes lluvias arrastraron rocas, residuos e incluso animales de patio y causaron daños a la infraestructura carretera y al hogar de los pobladores.
Otras dependencias estatales también brindaron su apoyo a las comunidades, tales como la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), cuyo personal efectuó labores de abastecimiento de agua y víveres, prevención y reubicación de familias en situación de vulnerabilidad.
El Cuerpo de Bomberos acudió a despejar los caminos y vialidades de árboles caídos y otros obstáculos para el tránsito peatonal y vehicular, mientras que el cuerpo de Paramédicos se encargó de trasladar a las personas que padecían alguna enfermedad a lugares seguros.
Igualmente, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Yucatán llevó a cabo una intensa labor. Estableció un centro de acopio en sus instalaciones y transportó lo recolectado hacia Yaxcabá, tanto a la cabecera como a Santa María, comisaría cuyas vías de acceso quedaron bloqueadas; a pesar de esto, junto con habitantes y el DIF municipal, se logró hacer llegar los paquetes alimentarios, productos de higiene y diversos bienes a más de 80 familias. Los apoyos también llegaron a Tecoh, Kinchil, Celestún y Hunucmá.