Ciudad del Vaticano. El papa Francisco consideró este miércoles "intolerable" cualquier forma de racismo, en un mensaje en el que se refirió las protestas en Estados Unidos tras la muerte de George Floyd y condenó la violencia que impregna parte de las manifestaciones.
"No podemos tolerar ni cerrar los ojos ante ningún tipo de racismo o exclusión y pretender defender la santidad de toda vida humana", dijo Francisco en su audiencia, añadiendo que "nada se gana" con reacciones violentas como las registradas en estos días.
Al mismo tiempo, debemos reconocer que "la violencia de las últimas noches es autodestructiva (...). Nada se gana con la violencia y mucho se pierde", dijo en un mensaje específico a los creyentes de lengua inglesa.
"Sigo con gran preocupación los dolorosos disturbios sociales que se están produciendo en su nación en estos días, tras la trágica muerte del señor George Floyd", dijo el papa.
Francisco dijo que estaba rezando junto a la iglesia de Estados Unidos y sus creyentes "por el descanso del alma de George Floyd y de todos los demás que han perdido sus vidas por el pecado del racismo".
"Rezamos por el consuelo de las familias y amigos afligidos, y rezamos por la reconciliación nacional y la paz que anhelamos", dijo el papa.
La muerte de George Floyd, un hombre negro de 46 años que falleció el 25 de mayo en Minneapolis por asfixia cuando era inmovilizado por un agente tras haber sido arrestado, desató una impresionante ola de protestas contra el racismo y la violencia policial en todo el país.