Las declaraciones de la Secretaría de Gobernación (SG) de que no se recortarán los fondos de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) no son suficientes para descartar que esa baja presupuestal ocurra, advirtieron organizaciones civiles, las cuales manifestaron su preocupación por la incertidumbre en la que se mantiene al organismo.
Valentina Peralta, coordinadora nacional de la Red Eslabones por los Derechos Humanos afirmó que “a las palabras se las lleva el viento”, por lo cual será importante que la titular de la SG, Olga Sánchez Cordero, y el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, deben garantizar con toda claridad que los fondos de la CEAV no disminuirán.
El comunicado de la SG, recalcó, “son palabras escritas en un papel, pero nada de eso existe si no están soportadas con un presupuesto suficiente y comprobable. Que descongelen los recursos y se le dé a la CEAV lo que tenía. Es un derecho de la ciudadanía contar con un sistema de atención a víctimas que cumpla en cantidad y calidad”.
Por su parte, Jeremy Renaux, subdirector de la organización Idheas-Litigio Estratégico en Derechos Humanos, señaló que si se llegara a concretar el recorte presupuestal éste podría significar la desaparición de la CEAV, aunque al mismo tiempo consideró que es un escenario poco probable, por la respuesta “contundente” que habría de organizaciones civiles y de víctimas.
“Yo esperaría que el gobierno federal reconozca que la Comisión cumple y por lo tanto no permita una afectación a su presupuesto. Lo más urgente es que se confirme que no van a tocar sus recursos, y urgentísimo que el Presidente convoque al pleno del Sistema Nacional de Atención a Víctimas y mande el mensaje claro de que deben involucrarse en esta tarea todas las instituciones del Sistema y los tres niveles de gobierno”, indicó.
“No sé si hay una intención del gobierno de desaparecer a la CEAV como tal o hay un desconocimiento sobre lo que hace y su importancia en el contexto actual. Lo que sí te puedo decir es que en esta administración no hemos visto voluntad política de fortalecerla. El gobierno federal no puede pedir ‘apretarse el cinturón’ durante una crisis humanitaria y sanitaria que afecta a tantas víctimas”, recalcó.
De su lado, Omar Bello, integrante de la Asociación Mexicana de Periodistas Agredidos y Desplazados, consideró que el verdadero propósito de las autoridades federales podría ser la desaparición de la CEAV para no reconocer las deudas y pagos que debe hacer, aunque ello implique dejar a las víctimas en la indefensión.
“Lo que ellos quieren es que desaparezca. La CEAV se queja de que hay muchos laudos laborales, muchos pleitos con las víctimas, y si desaparece el organismo, ¿a quién le van a cobrar? Le van a dar carpetazo a todo, para sacudirse a las víctimas, porque aún cuando pretendan iniciar otra institución, lo van a hacer desde cero”, dijo.
“¿Qué va a pasar con los periodistas que dependemos de la CEAV? Con esto que van a hacer, se viene al caño toda la lucha de más de 20 años de algunos defensores de derechos humanos que apenas vislumbraban un poco de justicia. La CEAV era una parte fundamental para poder vivir desplazado, y si en otros gobiernos se atrevieron a rescatar banqueros, ¿por qué hoy no rescatar a las víctimas?”, señaló.