Washington. Los ministros de finanzas del G-7 anunciaron este miércoles el compromiso de suspender al menos hasta fin de año los pagos de la deuda a los países más pobres, en línea con una medida similar del G-20.
"Nos comprometemos a implementar la suspensión del servicio de la deuda aprobada por el G-20 y el Club de París (el 15 de abril)", dijeron en un comunicado tras una conferencia virtual.
La iniciativa se pone en marcha con "la suspensión de los pagos oficiales de la deuda bilateral de los países más pobres hasta fines de 2020 y quizás por más tiempo", indica el texto del G-7, que integran Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido.
Con ello se busca "proporcionar a los países más pobres margen fiscal para financiar medidas sociales, de salud y de otro tipo" en el marco de la pandemia de coronavirus, agrega.
"Continuamos trabajando juntos para avanzar en la respuesta económica internacional a la pandemia de Covid-19, con un enfoque en los países más pobres y vulnerables", indicaron los ministros del grupo de potencias occidentales.
El texto subraya que la crisis sanitaria "ha exacerbado la vulnerabilidad de muchos países de bajos ingresos", afectando su capacidad de pagar la deuda y financiar el desarrollo en el largo plazo.
Los ministros de finanzas y gobernadores de los bancos centrales del G-20 habían aprobado el 15 de abril una suspensión temporal del servicio de la deuda para los países más pobres, con la coordinación de un calendario común también aceptado por el Club de París.
Todos los acreedores bilaterales oficiales participan en esta iniciativa, en tanto el G-20 instó a los acreedores privados a unirse a ella.