Ciudad de México. Proyectos de artistas visuales de Jalisco tienen en común ante la pandemia que ya trabajan de forma colaborativa con diferentes artistas visuales, por lo que las dinámicas de trabajo tuvieron que modificarse al iniciar el tiempo de aislamiento social.

Cultura UDG, encabezada por Ígor Lozada, llevó a cabo la segunda mesa de diálogo enfocada a las artes visuales con el título “El no lugar. Espacios Independientes”, este evento que fue transmitido de forma gratuita a través de Facebook sirvió dialogar sobre la situación que los espacios y proyectos independientes están viviendo durante esta contingencia. La charla contó con la presencia de Irvyn Roho, Margarita Torres y Luciano Maldonado deProductora Capital Variable; Marita Terriquez y Miguel Ángel Cisneros de Casavidrio y MarcoValtierra de Espacio Cabeza. Esta mesa de diálogo fue moderada por Joao Rodríguez, coordinador del programa académico de la Bienal de Pintura José Atanasio Monroy.

Los tres proyectos que participaron operan desde la ciudad de Guadalajara: Capital Variable es un colectivo de artistas plásticos, Espacio Cabeza es un colectivo de arte contemporáneo que presenta proyectos de forma nómada en espacios no necesariamente expositivos, mientras que Casavidrio es un taller de artistas que funge de forma colaborativa con otros artistas.

Ante la oferta excesiva de contenidos digitales resulta abrumador para los consumidores tener que elegir qué ver ante tantas posibilidades en la pantalla, sin embargo las experiencias con el arte plástico en las galerías y exposiciones son también un espacio de convivio, mientras que los contenidos en redes sociales son solo una extensión de lo que ocurría en el espacio físico; así lo señala el curador Marco Valtierra.

Es tiempo en el que los espacios culturales independientes, como Casavidrio, tienen que cerrar sus puertas al público ha sido aprovechado por sus directores para trabajar en el archivo, realizar curadurías digitales, planear nuevos proyectos para generar comunidad y trabajos editoriales que registren las obras ya existentes. Si bien trabajar en la pintura es un proceso muy solitario, una vez terminada la obra requiere

una serie de redes de postproducción que involucra dinámicas de contactos que han sido claramente modificados por las medidas de aislamiento social.

Los tres colectivos cuentan su experiencia en la procuración de fondos para llevar a cabo todo los proyectos culturales, y coinciden en la autogestión y el autofinanciamiento como estrategia para la producción de arte plástico.

Mantener la independencia en la procuración de fondos de los espacios independientes les permite tener la flexibilidad de modificar y proponer cambios con mayor potencial, por lo que es importante para la generación de contenidos.

Se podrá consultar esta mesa de diálogo de forma permanente en el sitio www.cultura.udg.mx, plataforma que alberga otros contenidos como funciones, talleres, master class, recorridos virtuales y demás contenidos de diferentes expresiones artísticas.