Ciudad de México. El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) condenó la violencia política ejercida en contra de Jaquelina Escamilla Villanueva, directora del Instituto Municipal de las Mujeres (IMM) del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, tras ser separada de su cargo y recibir amenazas “por apegar su actuar y labor como funcionaria, conforme a los marcos nacional e internacional de los derechos humanos”.
Ayer, Escamilla Villanueva denunció que luego de que, por problemas técnicos, no se pudiera realizar la videoconferencia "Preservar la vida, la necesidad de tiempo. De los derechos y las realidades médicas en el estado de Oaxaca", que sería dirigida por Estefania Ricci quien forma parte de la dirigencia de la Ola Celeste -movimiento en contra del aborto-, el alcalde de la entidad Oswaldo García Jarquín le advirtió que si no se realizaba esta actividad presentará su renuncia al cargo.
El Inmujeres recordó que los mecanismos para el adelanto de las mujeres, como es el caso de este instituto municipal, fueron creados para defender y promover todos y cada uno de los derechos humanos de las mujeres, así como para poner en la práctica políticas, programas, acciones y servicios que contribuyan a cerrar las brechas de desigualdad que enfrentan las mujeres y promover su adelanto en la vida comunitaria, económica, política y social.
Indicó que de acuerdo con las recientes reformas en materia de violencia política por razón de género publicadas el 13 de abril pasado, obligar a una mujer, mediante fuerza, presión o intimidación, a suscribir o avalar decisiones contrarias a su voluntad o a la ley, así como imponer sanciones injustificadas o abusivas, que impidan o restrinjan el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres, constituyen expresiones de violencia política por razón de género que son sancionadas.
Asimismo, agregó, la Constitución, el Código Penal y demás normatividad en materia de derechos políticos y electorales para el estado de Oaxaca, sancionan la violencia política de género, por lo que los argumentos para la destitución y las amenazas recibidas por Jaquelina Escamilla constituyen una violación flagrante a sus derechos humanos y políticos
El Inmujeres expresó su solidaridad con Jaquelina Escamilla y destacó que dará seguimiento puntual a su caso para hacer justicia.