De acuerdo con los más recientes datos oficiales, en abril el aeropuerto capitalino movilizó 295 mil 654 viajeros, muy por debajo de los 4 millones 127 mil 284 que transportó en 2019 en ese lapso. El día con el mayor número de pasajeros atendidos el mes pasado fue el miércoles primero, con 16 mil 661 viajeros.

Pero no sólo eso, durante las vacaciones de Semana Santa, los números también se fueron en picada, ya que por el AICM llegaron o salieron en promedio 157 mil 682 usuarios. En el mismo periodo de hace un año viajaron un millón 676 mil 440 personas desde o hacia la terminal aérea.

Asimismo, el mes pasado se registraron 5 mil 483 operaciones nacionales e internacionales de salidas y llegadas, mientras que en 2019 se contabilizaron 35 mil 519.

Para Fernando Gómez Suárez, analista del sector aeronáutico, aeropuertos y aerolíneas tardarán en recuperarse hasta un año tras la fuerte caída producto de la crisis que generó la emergencia sanitaria por el virus del SARS-CoV-2.

En entrevista con La Jornada, mencionó que en 2009, debido a la influenza A/H1N1, el AICM tuvo el primer retroceso y se recuperó después de un par de años; sin embargo, en ese entonces la baja también fue por la crisis económica, y luego en 2010 a causa de la salida de operaciones de Mexicana de Aviación y sus empresas filiales. Fue hasta 2011 cuando el aeropuerto más importante y entrada principal al país repuntó con cifras históricas de usuarios transportados.

“El Covid-19 presenta un escenario distinto en el cual la recuperación podría ser lenta, pero hay que tomar en cuenta dos aspectos, el financiero propio de las aerolíneas, así como el de la confianza del pasajero para regresar a volar. En el caso de México la recuperación dependerá de apoyos que reciban las líneas aéreas. En otros países el gobierno las está respaldando a través de financiamiento y créditos, pero aquí en el país no ha sido así. Hay posibilidad de que el mercado aéreo se recupere de manera gradual, pero el nuevo regreso a la normalidad aérea tendrá que cambiar.

Habrá que esperar las medidas que se implementarán, cuando se adapte la sana distancia en aviones, repercutirá en menor capacidad u oferta de asientos, y por ello se encarecerán los boletos de avión y afectará más a quienes buscando vuelos económicos en comparación con quienes tienen capacidad financiera alta.

El especialista reiteró que el regreso a la nueva normalidad en el sector requerirá de filtros sanitarios más estrictos, sobre todo un mayor equipamiento médico para revisar y monitorear a extranjeros y vuelos internacionales que ingresan diario por el aeropuerto capitalino, puerta principal de acceso al país.