Ciudad de México. Las epidemias como la que hoy vivimos por el virus SARS-CoV-2 tienen un origen multifactorial, entre los cuales está la sobrepoblación mundial; los cambios ambientales; la globalización que permite el traslado de bienes, mercancías y personas; y la invasión cada vez mayor a selvas y bosques en búsqueda de nuevos sitios para vivir y cultivar.
Para la Susana López Charretón, investigadora del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó también que el crecimiento poblacional y estilo de vida han ocasionado el contacto cada vez mayor con animales silvestres, lo que permite el desarrollo de nuevos eventos zoonóticos.
Por ejemplo, añadió, Covid-19 es una enfermedad emergente ocasionada por una zoonosis, aunque aún se desconoce el animal transmisor del virus, y esa es una investigación a la que se dedica activamente China.
Al participar en “El Aleph. Festival de Arte y Ciencia. Las Posibilidades de la Vida: Covid-19 y sus Efectos”, precisó que la zoonosis son eventos frecuentes. “Sabemos que 60 por ciento de las enfermedades humanas infecciosas son de origen zoonótico, y al menos 75 por ciento de los patógenos de todas las enfermedades infecciosas que nos aquejan, se deben a virus que saltan de animales a humanos”.
En un comunicado de la UNAM , la investigadora señaló que la enfermedad del coronavirus está presente en prácticamente todo el mundo, y en América el número de infectados ha rebasado las estadísticas del resto del orbe, y continuamos en la fase aguda de la infección.
En su exposición “Un nuevo coronavirus SARS-CoV-2, situación actual”, López Charretón indicó que en el mundo grupos de científicos trabajan actualmente en el desarrollo de 41 sistemas diagnósticos autorizados, de los cuales existen dos pruebas moleculares y serológicas que permiten detectar la presencia del virus; se ensayan 23 tratamientos para controlar la enfermedad y varios prototipos de vacunas.
Además, dijo que se contemplan medidas para controlar su replicación y disminuir los días de enfermedad de las personas contagiadas.
Por ser un virus muy infeccioso, al cual todos somos susceptibles y para el que no existe aún tratamiento antiviral específico, debemos mantener el distanciamiento social, lavarnos las manos con frecuencia, evitar tocarnos la cara con las manos sucias, usar el estornudo de etiqueta, mantener la sana distancia y, si es necesario salir a espacios públicos, usar cubrebocas, reiteró.