Ciudad de México. El gobierno mexicano cuenta con un reducido margen de maniobra para extraer más recursos del presupuesto a fin de paliar la crisis económica actual y aunque ha generado ahorros en el primer trimestre del año, la deuda total del sector público escala debido a la depreciación de peso, con un incremento de 990 mil 097 millones de pesos en los primeros tres meses del año, de acuerdo con un análisis de HR Ratings.
En videoconferencia, Félix Boni, director general de análisis en la calificadora mexicana, subrayó que independientemente de las medidas de austeridad implementadas por el gobierno para enfrentar la crisis, con un déficit presupuestario menor al estimado por el gobierno, las finanzas públicas al primer trimestre reflejaron que Hacienda “se endeudó más de lo necesario”.
Consideró que los movimientos que pudo hacer la Secretaría de Hacienda en el primer trimestre del año, ahorrar y aún así permitir el incremento de deuda, responden a una “cuestión operativa”.
La dependencia –según el análisis de Boni– tomó una decisión estratégica de endeudarse ahora para aprovechar las condiciones de mercado y gastar en los siguiente meses, cuando los efectos de la crisis económica sean más severos, incremente el déficit presupuestario e incluso financiar a Petróleos Mexicanos, al aprovechar sus mejores condiciones en los mercados internacionales.
Recalcó que, si bien en el primer trimestre incrementaron en 9.2 por ciento los ingresos del gobierno, pese a la caída de 27 por ciento en los recursos provenientes del negocio petrolero, esto se debe a que “el combate a la evasión ha tenido mucho éxito”. Sin embargo, con la caída en la actividad económica dicha estrategia puede quedar corta para mantener la recaudación.
De acuerdo con el economista, los gastos obligatorios como el pago de la deuda, las pensiones y las participaciones a estados agrupan 70 por ciento del presupuesto. Con ello, sólo se puede disponer de 30 por ciento de esos recursos.
Agregó que en este contexto, si hay algún espacio para reducir el gasto, la cuestión es de qué rubros. Si bien las participaciones no se pueden recortar si no caen los ingresos, podría hacerse algo en las transferencias a IMSS e Issste en los activos de retiro.