Ciudad de México. El director del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), Alfonso Morcos Flores dijo ante senadores que se decidió posponer temporalmente el arranque de 17 plantas eléctricas eólicas y fotovoltaicas, “no para fastidiar la inversión”, sino para garantizar que no haya fallas o interrupción del suministro de electricidad o incluso un apagón masivo durante la emergencia sanitaria que se vive en el país.
Al final de una accidentada reunión virtual con los integrantes de la Comisión de Energía, del Senado, en la que fue cuestionado por legisladores de la oposición, sobre todo del PAN, que expresaron gran molestia por la decisión, el titular de la Cenace respondió que hay muchas inversiones detenidas, no sólo en el sector eléctrico.
“Toda la gran infraestructura industrial de México está parada”, dijo e insistió en que se detuvo el arranque de las nuevas centrales eólicas y fotovoltaicas, porque en la situación de emergencia provocada por la pandemia del Covid 19 “tiene prioridad la salud y la vida humana antes de cualquier cosa.
Por ello, explicó, es necesario utilizar las fuentes más seguras de generación eléctrica,para evitar apagones o fallas en el suministro, ya que nuevas plantas de energías renovables pueden complicar la operación del Sistema Mexicano Eléctrico en los próximo dos años, debido a que va en aumento la generación de energía con las Plantas Eólicas y Solares.
“Poner en riesgo la demanda que se requiere para los hogares, que está la gente confinada, para los hospitales, para todas las nuevas instalaciones que se han adecuado como centros de salud pues creo que sería irresponsable”, dijo.
En es reunión a distancia en la que el funcionario estaba en Coahuila y la mayor parte de los senadores en sus estados, con grandes fallas tecnológicas -se iba la voz o la imagen por momentos - otro integrante del Cenace, Jonathan Lugo, hizo una amplia explicación con Power Point en la que expuso que de las 17 centrales eólicas y fotovoltaicas con suspensión temporal de pruebas, nueve de ellas tienen un contrato de largo plazo, de entre 15 y 20 años.
En total tendrán una capacidad instalada de 2 mil 326 megawatts (MW), que se sumarían a los 9 mil 932 MW que general las empresas eolicas y fotovoltaicas que ya operan y a las que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) debe comprar la electricidad.
Destacó que si bien las centrales de energía limpia tienen muchas ventajas, también desventajas, que afectan la calidad de frecuencia y requieren fuentes de respaldo para que la variabilidad sea compensada. Se requiere otras fuentes de generación para cubrir esa indisponibilidad cuando no hay sol ocuando no hay viento.
Explicó que hubo ya una falla de una central el pasado 29 de abril a las 16 horas en la línea de 400 KV de Tierra Mojada – Atequiza- con una reducción súbita de generación fotovoltaica de 77 segundos y provocó una reducción súbita de 521 MW en la zona y una recuperación incorrecta, ya que . siete minutos después todavía no se establecía la generación.
El Cenace, explicó, debe monitorear de manera constante que la frecuencia de generación en todas las centrales eléctricas no esté nunca por debajo de 60 ciclos por segundo, ya que implica que falta suministro, pero tampoco que esté por encima de esa cifra, porque entonces hay que reducir la generación en alguna central.
A los senadores del PAN, Julen Rementería y Xochitl Gálvez no estuvieron de acuerdo con la explicación técnica. “Que le den gracias a Dios que están en un foro con senadoras y senadora porque si estuvieran en una reunión con expertos ingenieros ya les hubieran chiflado”.
El presidente de la Comisión de Energía, Armando Guadiana, de Morena, resaltó que se deben impulsar las energías limpias,pero el Estado debe defender el interés ciudadano.